Postura dividida por uso de móviles en los colegios

A partir del próximo mayo, que iniciarán las clases del nuevo período lectivo en el régimen Costa, los estudiantes podrán llevar sus teléfonos celulares a las instituciones educativas. Además, el uso de corbata será opcional.

El anuncio realizado por el ministro de Educación, Augusto Espinosa, en los establecimientos que ha visitado para informar -entre otras temáticas- sobre la repotenciación de los planteles, ha causado algarabía en los alumnos. “¿Les gusta la idea?”, preguntaba el titular de la cartera de Estado mientras recibía un “sí” unísono de respuesta.

El pasado miércoles en los colegios Eloy Alfaro y Víctor Hugo Mora Barrezueta, en Guayaquil, ante profesores, padres de familia y estudiantes, notificó que se instalará una red de internet inalámbrica, que también beneficiará a las viviendas ubicadas a 100 metros a la redonda de los centros educativos.

Espinosa reitera que el acceso a las redes sociales estará restringido y defiende la nueva disposición. “Una de las herramientas del siglo XXI es el celular. Si vamos a tener internet aquí, por qué no usarlo en el proceso de formación de aprendizaje. No sacamos nada quitándoles, más bien que aprendan a usarlo de manera adecuada, porque el inteligente no es el artefacto, sino el que lo usa”, sostiene.

Bertha Zambrano, rectora del colegio Víctor Hugo Mora Barrezueta, señala que la iniciativa es excelente “siempre y cuando sea utilizada en fines educativos”.

Francisca Caicedo, madre de Lisbeth, quien cursa el décimo año de Educación Básica, opina que la medida actualizará a los colegiales y mejorará su rendimiento.

Mientras que Joffre, quien tiene 12 años, no está de acuerdo con la resolución porque considera que sus compañeros se distraen con el dispositivo cuando el profesor da la clase. Además, porque pueden ser víctimas de robo.

El presidente de la Asociación Ecuatoriana de Psicólogos, Jorge Luis Escobar, considera que el sistema no está apto debido a que los educadores deben ser reestructurados y reeducados previamente.

“Si hay uno que se oponga, (un maestro) genera ruido y el chico o la chica regularmente miente u omite como un recurso de defensa. Habría que ver hasta qué punto la sociedad está dispuesta al cambio”, expresa.

Sin embargo, el psicólogo Escobar sostiene que si se permite el acceso a esta tecnología, que antes era penada, implica que se ha superado el nivel de proceso formativo y que el joven está conciente de su responsabilidad en el uso del móvil.

El coordinador Social del Contrato por la Educación, Milton Luna, propone generar procesos de debate entre la comunidad educativa para en lo posterior tomar decisiones.

“Debe establecerse un plan efectivo luego de compartir experiencias entre padres y profesores para evitar que el uso de los aparatos distorsione el objetivo de la enseñanza-aprendizaje”, asegura.

Además, señala que el uso no obligatorio de corbata debe ser otro tema de análisis ligado a la identidad institucional.

Espinosa, también, ofreció una laptop con internet para cada docente, que servirá para preparar las clases y controlar la asistencia de los estudiantes.

Asimismo, enfatiza que los profesores podrán hacer posgrados, maestrías, entre otros estudios de cuarto nivel, hasta el año 2017 y trabajar una hora menos, de las ocho, para dedicar ese tiempo a la especialización fuera del establecimiento educativo.