Ecuador, 25 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Las mascotas y sus dueños disfrutan con el doga

Docenas de personas participaron en el evento con sus mascotas y conocieron las bondades del doga .
Docenas de personas participaron en el evento con sus mascotas y conocieron las bondades del doga .
Foto: Karly Torres / El Telégrafo
29 de diciembre de 2018 - 09:13 - Juan Carlos Holguín

Reina hizo toda la rutina junto a su padre, Marcel Noura. Cuando él se arrodillaba, se inclinaba o se acostaba, ella trataba de seguirle el ritmo y se acoplaba a los movimientos del hombre, quien a todo instante estaba pendiente de ella.

Al final, cuando llegó el momento de abrazar a la mascota y hacerle un masaje de relajación, Reina se acostó en los brazos de Marcel y se quedó totalmente quieta, relajada, disfrutando de las caricias que él le daba en las orejas, un movimiento que la instructora recomendó para calmar a los animalitos.

Observando a Reina, una hermosa perrita beagle de cuerpo rechoncho, rostro tierno y actitud plácida y amorosa, es difícil imaginar la terrible historia de maltrato y violencia que tiene detrás. Ella fue rescatada de un criadero clandestino, donde personas inescrupulosas la tenían como reproductora y la hacían parir una y otra vez, sin importarles su bienestar, solo sus hijitos, para venderlos.

Marcel la adoptó hace un año en una fundación dedicada al rescate de la fauna urbana y desde entonces es su engreída. Por eso, cuando supo que en Guayaquil se realizaría una maratón de Yoga Doga, no dudó en inscribirse junto a su hija de cuatro patas.

Marcel Noura realizó los ejercicios junto a 'Reina', una beagle rescatada de un criadero y que fue adoptada por él.Marcel Noura realizó los ejercicios junto a 'Reina', una beagle rescatada de un criadero y que fue adoptada por él. Foto  Karly Torres / El Telégrafo

“Es una actividad muy chévere, lo importante es la conexión que se genera con la mascota. Y te relaja, compartes con ella. Más allá si haces bien o mal el ejercicio de yoga, se genera una conexión, una empatía con la mascota”, comentó mientras abrazaba a Reina, quien, acostada, disfrutaba de esos momentos de relax.

El Doga es una modalidad de yoga en la que se realizan movimientos que permiten incorporar a la mascota, para que interactúe con su dueño y ambos puedan trabajar juntos. No se trata de que el perro practique yoga, sino que participe en esta actividad, que para él será una especie de juego con su amo.

La idea surgió en Florida (Estados Unidos), en 2011. La profesora de yoga Suzi Teitelman observó que Coali, su perrita cocker spaniel, se sentaba a su lado en la esterilla cuando ella hacía yoga. El animalito la acompañaba cuando ella daba clases individuales y empezó a imitar sus movimientos. Además se relajaba durante las sesiones.

Poco a poco quienes asistían a sus clases empezaron a llevar a sus mascotas, pues se mostraron encantados de compartir esto con sus amigos peludos. Y así la modalidad comenzó a expandirse por varios países.

Las redes sociales han servido para popularizar esta actividad. Son muchos los videos y fotos que circulan por internet, en las que se observa a las personas haciendo yoga con sus mascotas encima, algunas estirándose al igual que sus amos, otras relajadas a su lado mientras las personas efectúan alguna contorsión.

En Guayaquil el Doga no es practicado en forma masiva. Por eso la Fundación Almanimal organizó una feria en el club Biblos (vía a Samborondón), en la que incluyó el Yoga Doga como forma de dar a conocer la modalidad, abrirle las puertas y ofrecer a los participantes la experiencia de compartir un rato agradable con sus mascotas.

El objetivo del evento fue recaudar fondos para construir un nuevo refugio de rescate de fauna urbana, ya que con el que cuenta actualmente la agrupación se le ha quedado pequeño.

“Además buscamos unir dos cosas maravillosas: el amor por las actividades al aire libre, por una disciplina como el yoga, que aporta mucho en lo físico y en la parte emocional de la persona, y el amor por los animales”, explicó María Teresa Puig, presidenta de Almanimal, quien participó con Mochita, una perrita chihuahua a la que le faltan las patas delanteras y que fue rescatada por la fundación años atrás. Había sido abandonada en un basurero y actualmente es uno de los símbolos del grupo.

Los animalitos se integraron a la rutina física junto a sus amos.Los animalitos se integraron a la rutina física junto a sus amos. Foto Karly Torres / El Telégrafo

Es la primera vez que realizan esta actividad y esperan hacerlo al menos una vez por mes, mientras coge fuerza su práctica. En esta feria contaron con la colaboración de Yoga Shala, un centro donde se practica yoga y que esta vez decidió incursionar en el Doga. “Creo que hemos abierto una ventana a una nueva disciplina”, dijo María Teresa. El Facebook de la fundación es @almanimalecuador.

El Yoga Doga se hizo con la guía de Leonela Arias, instructora del Yoga Shala. La joven se ubicó en una tarima y con la compañía de un pequeño perro que hace parte de los canes rescatados por la fundación Almanimal, le enseñó a los más de 30 participantes cómo hacer los movimientos integrando a sus mascotas, las cuales permanecían al lado de cada persona. Se hicieron dos sesiones, cada una de aproximadamente media hora.

Leonela practica yoga hace 6 años y para esta ocasión investigó, vio algunos videos y le preguntó a instructores sobre los ejercicios adecuados para la integración hombre-animal, además de algunos ejercicios que le ayuden a la mascota a relajarse. “La intención es ante todo divertirse, traes a tu mascota, se conectan los dos y se pasa un lindo rato. Solo se debe tener un tapete y ganas de divertirte”.

Entre los ejercicios que se realizaron hubo algunos especiales para los perritos, que los ayudó a aliviar sus columnas, sus vértebras, y un masaje facial que los relajó. “Pasas un rato muy agradable con tu perrito y le demuestras cuánto lo quieres, pues se forma un lazo especial entre ambos”, indicó la instructora.

El Doga puede ser practicado por perros de cualquier raza y edad, aunque dependiendo del tamaño del animal se determinará cuáles son los ejercicios apropiados. Lo mismo ocurre con la edad, pues entre más años tenga, menor será su flexibilidad.

Ana Margarita Nevares compartió el momento con Nina, su french poodle de 6 años. Era la primera vez que asistía a un evento similar, pero ella practica yoga en su casa y su mascota siempre la acompaña en esta actividad.

La mujer cargó a su perrita siguiendo las directrices de la instructora, la levantó y luego, en el suelo, la puso sobre su cuerpo. Y en todo momento el animalito se mostró feliz y dispuesto a jugar. “Ella se integra porque está acostumbrada a mí. Como ya lo hemos hecho antes, por eso se relaja y disfruta”.

En la actividad hubo perros de diferentes razas y edades. Todos pueden realizar el doga.En la actividad hubo perros de diferentes razas y edades. Todos pueden realizar el doga. Foto Karly Torres / El Telégrafo

Para Ana, estos son momentos valiosos para estar con su amigo peludo. “Es una integración, una forma de compartir un momento con tu mascota”.

Ella destacó que se realicen este tipo de eventos en la ciudad, porque en la actualidad no hay lugares para practicar la actividad. “A mi me gusta apoyar cuando se abren nuevos espacios y los comparto”.

“Yo pienso que las personas que tienen mascotas deben darles cariño, saber que ellas tienen sentimientos igual que un humano. Hay que tratarlas como te gustaría que te traten a ti. Disfrutar de los espacios al aire libre, en la naturaleza, eso es bueno tanto para ti como para ella”, dijo.

Lo mismo piensa Marcel Noura, el padre de Reina. “Ojalá que se realicen otros eventos así, para que la gente contribuya con estas fundaciones que rescatan animales. Hay demasiado maltrato y descuido hacia la fauna, no solo con las mascotas, perros y gatos, sino con todos los animales en general. Tenemos que generar esa empatía hacia ellos”. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Social media