Los padres de Ashya luchan por su custodia

Brett King, 51 años, y su esposa Naghemeh, de 45 años, están emocionados. Tras varios días por fin podrán ver a su hijo Ashya, y quizás se pondrá fin a una odisea por recuperar la custodia legal del menor. Fue una pesadilla que incluso los llevó a pasar en una prisión española por sacar sin permiso médico a Ashya del  hospital de Southampton, en el sur de Gran Bretaña.

El menor sufre un tumor cerebral y fue sacado del hospital y la policía española lo encontró en Vélez-Málaga el pasado jueves. Se encontraba con toda su familia en un hotel de la localidad. Los progenitores buscan atención en el extranjero con un tratamiento menos agresivo, que le permite al niño vivir sus días con mayor felicidad y no atado a una silla médica.

El tratamiento al parecer se aplicaría en República Checa y sería en base a protones y no con la radioterapia convencional.

“Su madre ha pasado la noche con él”, afirmó una fuente del hospital de Málaga, donde está ingresado el pequeño Ashya, de 5 años, precisando que “está estable”.

“Cuando vio a los padres, yo creía que le daba algo, no dejaba de llorar y de estar feliz”, afirmó este jueves el abogado de los King, Juan Isidro Fernández Díaz, a la televisión pública española.

“Ha estado tanto tiempo sin sus padres que se ha deprimido”, dijo Brett (foto), el padre de Ashya, quien depende de una sonda nasogástrica para alimentarse.

El hecho ha revivido el debate social sobre quién decide por el bienestar y futuro de un niño ante una enfermedad terminal: ¿los padres o el Estado?

Mientras tanto el hospital donde se encuentra el menor asegura que el trámite es exclusivamente del consulado británico. La justicia de ese país tiene prevista una audiencia el próximo lunes para decidir si mantiene la custodia del pequeño o la devuelve a los padres.

Los abogados de la familia han enviado a las autoridades británicas documentación que incluye informes médicos del pequeño para que los padres puedan recuperar cuanto antes la custodia de Ashya.

Desde hace una semana, el periplo de esta familia tiene en vilo al Reino Unido, donde la prensa había descrito a los padres, testigos de Jehová, como ‘secuestradores’. Pero luego el rechazo se convirtió en simpatía ante un video que colgaron los padres en Youtube, quienes aseguran que solo luchan por salvar la vida de su hijo. “Se mueve, mira y está mucho mejor que en el hospital, donde solo estaba acostado mirando al techo”, se escucha decir al padre del niño en el video.

Otra interrogante de la policía británica es si la fe de los padres interviene al momento de decidir en el tratamiento. “Lo único que sabemos es que el tiempo para el pequeño Ashya sigue transcurriendo”, dijo un uniformado.