Los globos del deseo compiten con las cábalas
En Ecuador, durante la última celebración de fin de año, la ciudadanía no solo realizó las cábalas tradicionales como el uso de ropa interior amarilla, dar la vuelta a la manzana con una maleta o comer las doce uvas pidiendo un deseo. También optó por los globos del deseo, los cuales tuvieron gran acogida.
Se trata de globos de papel de arroz (bambú), por lo general blancos, que contienen una vela dentro. Las personas escriben sus deseos para después encender la vela y dejar que suba hacia el firmamento. Según la creencia popular, estas linternas vuelan hasta lo más alto para hacer que el deseo escrito se cumpla. Mientras más alto llegue, más posibilidad existe de que se haga realidad lo pedido.
Nicole Álvarez, de 20 años, los ha lanzado en varias ocasiones al cielo y no solo lo hizo el pasado 31 de diciembre, también lo hace cuando celebra su cumpleaños.
“Pido deseos, lleno todo el globo; es divertido y se ve lindo”, expresa Nicole, quien asegura que la primera vez que lanzó un globo del deseo fue con la familia taiwanesa de su esposo, hace tres años.
Zhuge Liang, militar y estratega chino, fue el inventor de estos globos hace 1.800 años. En aquel entonces los llamaban Khoom Fay y se los utilizaba para comunicarse entre los militares, gracias a que alcanzan una gran altura y pueden observarse a largas distancias. A partir de ese momento han sido utilizados en varios festivales orientales, como el Festival de Yee Peng, en Mae Jo, y el Festival Tradicional de Linternas Chinas, en Taiwán.
La tendencia ha llegado hasta nuestro país y una de las empresas que los comercializa es Globos de Luz.
Yenila Torres de Cunalata, propietaria de la marca, se ha dedicado a la venta de los globos del deseo desde 2014. “Nos aventuramos (a negociar los globos), les gustó mucho la tradición y en este fin de año la venta de los globos del deseo se elevó.
Fue el producto estrella”.
Yenila vende sus emblemáticos globos después de hacerles un control de calidad y los entrega con un manual adjunto para que la persona tenga cuidado al momento de elevarlo.
El espectáculo de lanzar globos del deseo al cielo no deja de ser un atractivo para las personas que los utilizan pero es peligroso. El Benemérito Cuerpo de Bomberos de Guayaquil alertó varias veces a la ciudadanía acerca de estos artículos por las redes sociales. (I)
