Antes de que culmine el período lectivo anterior, el ministro de Educación, Augusto Espinosa, señaló que en este año escolar, los estudiantes podrían llevar los celulares a clase. La normativa que regulará su aplicación aún no está lista, afirmó el viceministro de Gestión Educativa, Jaime Roca, luego de inaugurar el año lectivo Costa en el colegio Teniente Hugo Ortiz, en el norte de Guayaquil.

El ingreso de celulares en los colegios se anunció como una de las mayores novedades en el régimen Costa, pero, según el funcionario, tendrá que esperar hasta que el reglamento de uso de los móviles entré en vigencia en las próximas semanas. Mientras tanto, los alumnos no podrán llevarlos en la mochila.

Luis Murillo, profesor de Lenguaje y Comunicación, considera que el celular puede ser admitido en un trabajo grupal o de investigaciones, “para utilizarlo en palabras nuevas, expresiones, pero en clase tiene que ser planificado para que el alumno pueda sacarle el 100% de provecho y el maestro utilice el artefacto como medio de educación”.

El estudiante Milton Macías, de tercer año de bachillerato, aseguró que en el colegio aún no puede llevar su celular, aunque “sería beneficioso para actuar en clase”.

Álvaro Valarezo, de 17 años, manifestó que el dispositivo es algo que los beneficia “porque es una herramienta del siglo XXI”.

Para los padres, a más del uso pedagógico, el teléfono debe ser empleado como una herramienta de comunicación. “A veces ellos salen temprano y, por ejemplo, cerca no hay cabinas y no tienen cómo llamar. Sería una buena idea para comunicarse en caso de emergencia”, indicó Carlos Morales, padre de familia del Teniente Hugo Ortiz.

Otra de las novedades en la Costa fue la integración de 17 colegios de instrucción militar al sistema educativo público, como señala el acuerdo ministerial 002-10.

Vicente Ibarra, quien tiene a sus dos hijos, en primero y tercer año de bachillerato, en el Teniente Ortiz, sostuvo que el traspaso ha sido oportuno. “Solo en matrícula gastábamos en cada cadete cerca de $ 400 más la pensión de $ 170, quiere decir que nos ahorramos más de $ 550”, mencionó Ibarra, quien espera que la disciplina sea similar.

Quienes inician el año lectivo también tendrán nuevos compañeros. De los 325.026 nuevos alumnos, el 25% proviene de colegios privados. “Al inicio de nuestra administración la matrícula pública no llegaba a 20 mil estudiantes por año”, indicó el presidente Rafael Correa en la inauguración del año escolar en Manta.

Demanda por cupos

Mientras algunos establecimientos educativos iniciaban clases con los estudiantes de bachillerato, en los exteriores de los distritos de Educación 7 y 8 (Los Vergeles y Monte Sinaí) decenas de representantes aguardaban por atención a sus inconformidades, como lejanía al establecimiento asignado o cupos de hijos en planteles diferentes.

El viceministro Roca señaló que el proceso de inscripción continúa disponible y que en algunos casos el aumento de la demanda de padres de familia fue por descuido. “Abrimos el sistema desde el año pasado y han pasado tantos meses, y justamente ahora hay problemas, derivados por la falta de disciplina de los padres de familia”, dijo. Según el Ministerio de Educación, el número de personas que presenta observaciones equivale al 1% del total de inscritos, es decir, 3.250.

Las autoridades van a atender las quejas de los padres, de la zona 8, de acuerdo al último dígito del representante.

DATOS

El año lectivo en la Costa inició con 325.026 nuevos estudiantes, según datos del Ministerio de Educación.

De este grupo de estudiantes el 45% corresponde a niños y niñas, entre 3 y 4 años, de Educación Inicial.

Otros datos revelan que 18.825 jóvenes se reinsertan en el sistema educativo fiscal, luego de 2 años, y ahora buscan obtener un título de bachiller.

Alrededor de 2.600 alumnos con capacidades especiales ingresan a unidades inclusivas de la Costa.

Cerca de $ 85 millones se invirtieron en infraestructura educativa este año y otros $ 28 millones en la construcción de campamentos educativos.