Xavier Lucero Sarmiento tiene 13 años trabajando en ventas. Comercializó créditos en un banco, luego pasó a tomar los pedidos de una fábrica de gaseosas multinacional en las tiendas de la Martha de Roldós y el Suburbio, pero ahora se desempeña en la principal distribuidora de Guayaquil de una productora de alimentos. La diferencia es que ya no se siente solo como un vendedor; asegura que es eso y al mismo tiempo se considera un asesor comercial.

Aseveró que el éxito de su trabajo consiste en crearle la necesidad de los productos que ofrece a sus clientes. “Para eso hay que estar preparado y conocer 100% la línea con la que se labora”, puntualizó.

Lucero agregó que si recibe una respuesta negativa replantea inmediatamente su propuesta hasta convencer al dueño de la tienda o establecimiento. “Si me toca visitar a 10 personas y me dijeron inicialmente no, luego de cambiar mi estrategia logro conseguir la aceptación de por lo menos 8”, remarcó.

Pero, ¿cómo se logra aquello? dijo que para eso empieza por asesorar a sus clientes en cuanto a los valores agregados que tienen sus productos, les propone un “percheo” atractivo y finalmente una buena publicidad. El representante de ventas señaló que diariamente camina alrededor de seis horas por el sector suburbano, que es el asignado para que tome los pedidos.

Enfatizó que hay peligros como en cualquier otro trabajo, pero  por su experiencia ya sabe como debe manejarlos. “Mi zona es difícil. A diario me encuentro con personas que tienen antecedentes y similares. A ellos no se los debe enfrentar porque el riesgo es peor. Hay que tener la capacidad para crear una relación de respeto. Una vez que se consigue eso, uno puede trabajar tranquilo”, expresó.

Lucero recordó que uno de los días más difíciles que le tocó vivir durante todo este tiempo fue el 30 de septiembre, día en que se produjo la intentona golpista en contra del Gobierno. “Yo me encontraba en el corazón del Suburbio. De repente empezaron a salir personas que causaban miedo. Tuve que buscar un sitio seguro y esperé instrucciones de mis jefes que me dijeron que me retirara a mi hogar por seguridad”, concluyó.