El mayor logro para la niñez en Ecuador: el 97% accede a educación básica

Ayer se presentó en la Asamblea Nacional una resolución para institucionalizar de manera oficial la celebración del ‘Día de la Niñez’ ecuatoriana, en la que se destacará la necesidad de dar especial atención a este grupo poblacional, además de los adolescentes, en estado de emergencia.

El Consejo Nacional para la Igualdad Intergeneracional, con la Asamblea Nacional y el Ministerio de Inclusión Económica y Social, trabajó en la propuesta para que el 1 de junio y los siguientes días del mes se celebre a los niños y niñas del país con actividades lúdicas y pedagógicas.

En la Conferencia Mundial sobre el Bienestar de los Niños en 1925, en Ginebra, se declaró el 1 de junio como el Día Internacional del Niño. Pero cada país puede celebrar en fecha y forma diferente. Por ejemplo, en Bolivia se lo recuerda el 12 de abril, en Colombia el último sábado de ese mes, en Venezuela el tercer domingo de julio y en Argentina el segundo domingo de agosto.

Según Carlos Muñoz, presidente del Consejo Nacional para la Igualdad Intergeneracional, en Ecuador también se busca establecer un día oficial dedicado a los niños ecuatorianos, “evidentemente corrigiendo todo el tema de género en función del niño, sino hablar de la niñez”.

Como parte de la resolución se analizarán los logros en este sector de la sociedad, observarán los retos que aún faltan por superar, así como las metas que se deben alcanzar.
La secretaria nacional de Planificación y Desarrollo, Sandra Naranjo, ya dio un avance en su informe a la nación, el pasado 24 de mayo, del trabajo que ha realizado el Gobierno en los últimos 9 años.

Según la funcionaria, uno de los objetivos del actual régimen fue tener una educación de acceso masivo, de excelente calidad y gratuita. Agregó que la educación pública enfrentaba muchos desafíos, pues no todos los niños podían acceder a la escuela y, además, la educación era de baja calidad. “En los primeros exámenes regionales en los que participó Ecuador en la Unesco, en 2006, éramos uno de los 3 países con peores calificaciones regionales”, mencionó Naranjo.

Añadió que por la transformación en el sistema educativo en los últimos años hoy el país se encuentra en el promedio regional de estas pruebas. Es el segundo país que más ha mejorado en la calidad de educación de la región.

Según Naranjo, esta transformación se evidencia en el incremento de asistencia de niños y niñas a la escuela por la educación gratuita. Naranjo indicó que en los últimos 9 años Ecuador superó el promedio de América Latina en cuanto a asistencia a educación general básica llegando a 97% y en el resto de países es de 92,3%.

Actualmente asisten 1’200.000 niños a escuelas públicas, lo que representan el 80% del sistema educativo en el país. El incremento de matrícula se ha dado en los grupos vulnerables. La matrícula en grupos de niños y niñas indígenas ha pasado de 89% en 2006 a 97% en 2015, y en los afroecuatorianos de 89% a 95%.

Las matrículas en el bachillerato también aumentaron, lo que es significativo en el grupo de indígenas que pasa de 24,8% en 2006 a 55,4% en 2015. Algo similar sucede con el grupo de afroecuatorianos, la matrícula pasó de 44,3% a 57,9%.

La infraestructura es fundamental para estas metas, hay 62 unidades educativas del milenio, 5 unidades repotenciadas y la inversión en educación pasó de $ 1.083 millones a $ 2.804 millones en 2015.

En medio de estos avances, Naranjo mencionó un reto que aún tiene el país: erradicar el analfabetismo. En 2006 la tasa fue de 8,6% y en la actualidad es de 5,54%. Esta tasa se encuentra por debajo del promedio de América Latina que se ubica en 7,6%.

Otro reto que el país todavía debe enfrentar es la tasa de desnutrición infantil en menores de 5 años, uno de cada 4 niñas y niños ecuatorianos sigue siendo desnutrido, “lo que implica que no va a desarrollar todo su potencial de aprendizaje”.

Según Naranjo, el Gobierno redoblará esfuerzos para lograr erradicar la desnutrición infantil. “Como país será importante fortalecer la estrategia de desarrollo infantil, sabemos que los primero 5 años de vida de una persona son los más importantes. Hemos dado pasos agigantados y esta política debe seguir como una política de Estado”, dijo Naranjo.

Otros avances en estos últimos años (observar gráfica) es que el porcentaje de niños y niñas que asisten a programas de desarrollo infantil público se incrementó de 15,84% en 2009 a 20,27% en 2014. Además, 96.931 niños y niñas son beneficiarios de los Centros Infantiles del Buen Vivir (CIBV) hasta 2015 y 219.096 de la modalidad Creciendo con Nuestros Hijos (CNH). El número de CIBV emblemáticos pasó de 0 en 2005 a 69 en 2015.

Las condiciones de vida en este sector de la sociedad también han mejorado. De 2005 a 2014 se redujo a 12,9% los niños y niñas que viven en hogares hacinados. En ese mismo período, de 79,3% de niños y niñas que habitan en hogares con agua apta para el consumo se incrementó a 94,4%. En 4 años se redujo a 7,6% la pobreza por NBI (necesidades básicas insatisfechas) en este sector de la sociedad. En 2010 la tasa fue de 52,45% y en 2014 se redujo a 44,84%.

El trabajo infantil (de 5 a 17 años) disminuyó a 15,8% en 12 años. De 2001 a 2013 el trabajo infantil entre los 5 y 14 años bajó de 15,4% a 2,6%, y entre los 15 y 17 años la tasa pasó de 40,5% a 12,8%.

El acceso a salud también ha mejorado, el porcentaje de niños y niñas cubiertos por el seguro de salud públicas en 9 años se incrementó un 38,1%, de 4,93% en 2005 pasó a 43,01% en 2014. El número de atenciones médicas a niños y niñas en instituciones públicas y privadas creció un 51% en los últimos 9 años.

Después del terremoto del pasado 16 de abril se ha puesto especial atención a las niñas y niños de las zonas afectadas. Según Rita León, directora de los Centros Infantiles del Buen Vivir, el 30% de la población en los albergues es infantil. Es así que en estos lugares se realizan actividades para que los menores continúen con normalidad su desarrollo.

León agregó que se establecieron “espacios amigables” donde los menores realizan actividades lúdico recreativas para que a través del juego expresen lo que vivieron, esto como parte de un proceso de recuperación psico-social. En Pedernales, una de las zonas afectadas por el terremoto del pasado 16 de abril, 600 niños y niñas se reincorporaron a sus estudios.

Según Muñoz, se hará un seguimiento permanente, sobre todo psicológico, a las niñas y niños afectados por el desastre natural para que puedan desarrollarse con normalidad. Marisol Peñafiel, presidenta del Grupo Parlamentario por los Derechos de las Niñas, Niños, Adolescentes y Jóvenes, aseguró que la inversión estatal en la niñez es uno de los más altos en América Latina, espera que se mantenga con el próximo gobierno.

En función de todos estos logros, ella apoya la resolución del ‘Día de la Niñez’ en Ecuador. Según Peñafiel, esta declaratoria es fundamental para observar el trabajo realizado y para plantear nuevos retos en este espacio. Uno de ellos es que los menores culminen sus estudios, incluso los universitarios.

Antes de la declaratoria, las organizaciones sociales, representantes del Ejecutivo y la sociedad civil, se reunieron para consolidar la resolución, que luego fue debatida y aprobada en la Asamblea con 121 votos a favor.

Ayer también hasta la Casa Legislativa llegaron representantes del sector social para dar cifras sobre las políticas públicas implementadas. Para celebrar a los menores de edad hoy se tiene previsto realizar actividades lúdicas. La misma programación se hará en los albergues de las zonas afectadas por el sismo. (I)