Ayer se celebró el Día Internacional del Hombre (DIH), que fue inaugurado en 1999 en Trinidad y Tobago; luego se extendió a otros países, incluido Ecuador.

Hombres como Sebastián Muñoz y Juan Rojas ni siquiera sabían que había un día dedicado a ellos, pero concuerdan que no es trascendental tener una celebración así, sino más bien trabajar para fortalecer la igualdad de género.

“Personalmente no apruebo un día específico para el hombre o algo determinado. Considero que los seres humanos de por sí deben vivir en respeto y tolerancia todos los días del año y no solo un día para  reivindicar el género”, dice Juan.

El joven considera que ser hombre “va más allá de lo biológico” y tiene que ver con los principios de servicio, trabajo y responsabilidad que “ayuden a destruir la mala imagen que se tiene ahora del hombre asociándolo con el machismo”.

Para Sebastián, en cambio, ser hombre aparte de cumplir los roles generacionales, ahora significa aventurarse en uno de los papeles más importantes de su vida: ser padre. En el término más amplio, cree que “la masculinidad es la realidad de contemplar dentro de la dualidad a la feminidad”.

Aprueba la celebración de un día del hombre solo en el caso de que la idea se centrara en el fortalecimiento de la igualdad de género por eso, asegura,  no espera flores ni que lo dejen subir gratis al bus, sino disfrutar de las simplezas de la vida a diario.

Esta celebración tiene el propósito de valorar las contribuciones positivas de los hombres a la sociedad, abordar sus problemas de salud, develar las discriminaciones hacia ellos y promover modelos masculinos que no solo dejen ver al hombre exitoso, al deportista y a la estrella de cine, sino también al ser trabajador y honrado.  

En Ecuador viven más de 7 millones de hombres según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) en 2010. Solo en Pichincha y Guayas habitan más de 2 millones de hombres. Datos más recientes del INEC revelan que el 71,3% es de jefes de hogar.

El sociólogo Gaitán Villavicencio aseguró a EL TELÉGRAFO que es importante resaltar la presencia del hombre en la sociedad desde la perspectiva de género en el desarrollo social, de tipo productivo y en el rol de la economía.

“Es necesario que no lo veamos como una contrapartida, es decir, que si hay el Día Internacional de la Mujer, por qué no hay el Día Internacional del Hombre”, sostiene.

Villavicencio considera que esta fecha debería difundirse más en el país para que el hombre cambie su perspectiva por una de derechos humanos, de garantías y deberes. “Sería bueno que se tome en cuenta el término de integración, respetando las diversidades”, dice.