Cursos vacacionales en la Sierra cuestan desde $ 60

Bryan Díaz está en séptimo de básica de una institución educativa pública y como la mayoría de los chicos de su edad tendrá 2 semanas de vacaciones a partir del viernes. Esto es parte de la finalización del primer quimestre en el año escolar Sierra y Amazonía. Ya tiene planeado qué hacer en estas vacaciones. Lo primero es descansar y luego jugar fútbol con los vecinos del barrio. Lo hará en la cancha cercana a su casa, aunque su madre aún no le da permiso para ello.

Los cursos vacacionales que su progenitora ha consultado salen del presupuesto familiar, además tiene otro hijo de 7 años.

“Observé algunas opciones, pero las más baratas están arriba de los $60 por semana y por niño.  No incluyen transporte. Como tengo 2 hijos, el gasto es excesivo”, comenta Lucy Rey, quien es empleada privada, pero su sueldo no le permite costear cursos de fútbol.

En esa misma situación se encuentra una decena de progenitores consultados en Quito, para quienes no es fácil encontrar actividades recreativas para sus hijos mientras están de vacaciones.

¿Qué hacer con los chicos en vacaciones?

La psicóloga educativa Elizabeth Montenegro recalca que no es necesario gastar grandes sumas de dinero para que los niños y jóvenes puedan divertirse en este período de vacaciones.

“Lo más importante es que los estudiantes cambien su rutina y puedan tener un mejor descanso, ya que en las últimas semanas han estado sometidos a un sinnúmero de evaluaciones académicas y eso es agotante para ellos”, dice Montenegro.

Los padres pueden empezar con dar mayor espacio a los hijos, para que ellos disfruten de actividades como el paseo en bicicleta o de incursiones en la cocina.

Mientras los hijos más grandes estén en casa, se les puede dejar hojas o implementos para que los pequeños realicen dibujos o pinten.

“Este período sirve para reforzar los lazos de autoridad de los padres y aunque se les puede permitir espacios para que disfruten de los videojuegos, hay que monitorearlos con llamadas telefónicas”, agrega.

Para los jóvenes, las actividades de socialización con sus pares, sean amigos o familiares, es una opción.

Otra alternativa es aprovechar el feriado de carnaval para visitar parques dentro de la ciudad. “Una salida de esas no es costosa y al contrario puede ser muy provechosa para todos los miembros de la familia”.

La psicóloga Silvia Andrade sugiere ocupar en actividades de lectura a los niños y jóvenes que tienen cierta dificultad con el aprendizaje. “Es aconsejable que en este período no se descuide por completo las actividades escolares. Una lectura diaria e interesante ayudará a la tarea”, dice Andrade.

A más de estas sugerencias están los cursos vacacionales que se ofertan como en la época de verano, pero en menor proporción.

Los cursos particulares se desarrollan por semana o por todo el período vacacional y de ese tiempo depende el costo.

Por lo general las actividades que se planean se realizan en una misma área, con grandes espacios verdes, y abarcan juegos didácticos, deportivos y hasta excursiones.

Estas alternativas incluyen transporte desde el domicilio y refrigerio. Los precios, dependiendo del lugar de residencia, varían entre $ 150 y $ 250 por niño.

También hay una opción gratuita para practicar fútbol y natación. En el Centro Activo 1 del Ministerio de Deporte (en el norte de Quito) se preparan cursos semanales en estas 2 disciplinas. Solo se requiere llenar una ficha y enseguida el niño a partir de los 3 años puede ingresar a la piscina cubierta o a las canchas sintéticas, donde enseñan exfiguras deportivas ecuatorianas.

Cada quimestre tiene 107 días laborables y un período intermedio de vacaciones. El descanso para los maestros y personal administrativo será también en febrero.

Datos

La Educación General Básica está generalizada en el país. La tasa de asistencia de la población de 4 a 14 años se incrementó al 96% en 2014.

La tasa de asistencia en el bachillerato, es decir de la población estudiantil entre 15 y 17 años, se incrementó del 47,9% en el 2006, al 65,1 % en el 2014, según datos del Ministerio de Educación.

Para aumentar la tasa de bachillerato el MinEduc tiene planeado 2 estrategias: que los establecimientos que ofertan hasta el 10º de EGB amplíen sus aulas para que desde el siguiente año tengan 1º de bachillerato.

La segunda estrategia es fortalecer el Bachillerato Técnico en 24 establecimientos educativos del país. Esto garantizará a los estudiantes que puedan ingresar al mercado laboral al final de sus estudios, y los incentivará a no desertar.