Ecuador, 18 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Ballenas y delfines vuelven a la costa de Ecuador

El periodo de avistamiento de ballenas jorobadas surge entre los meses de agosto y octubre.
El periodo de avistamiento de ballenas jorobadas surge entre los meses de agosto y octubre.
Foto: Cortesía del Mintur
22 de abril de 2020 - 16:14 - Jéssica Zambrano Alvarado

Santiago Pozo Santiana salió a pescar la mañana de este miércoles 22 de abril, casi un mes después de haberse iniciado el toque de queda de quince horas a nivel nacional.

Cuando estaba por volver de su jornada con sus compañeros de bote, casi a las 10:30 a.m. vio en las costas de Ayangue lo que su abuelo y su padre –sus antecesores pescadores – ya habían visto como un evento afortunado: un tiburón ballena.

“Y si me bajo, lo abrazo y lo subo al bote”, bromea su padre en el video, porque hacerlo sería imposible.

El tiburón ballena es el pez más grande conocido y según investigadores australianos pueden vivir hasta 100 años. Habita en aguas tropicales, como las de Ecuador, aunque su comportamiento se ha estudiado poco.

Ver esta publicación en Instagram

Tiburón Ballena en Ayangue #whakeshark #earthday Video : Alexander Pozo Santiana @alex.diver

Una publicación compartida de Ocean Reef (@oceanreef_ec) el

Santiago, a diferencia de su padre y su abuelo, se dedica al buceo recreativo, pero como en esta época no hay turistas sale a pescar como una buena parte de la comunidad, ante la imposibilidad de desarrollar otras actividades para la subsistencia.

“Igual todos cumplimos el toque de queda, después de las 14:00 cada quien está en su casa”, dice en una llamada telefónica.

Beatriz Almonacil, una bióloga española que reside en Ballenita, dice que es muy posible ver un tiburón ballena en las costas ecuatorianas.

“Es poco frecuente, pero sí están. Recuerdo que en la Isla de la Plata, un turista nos contó haber visto uno en octubre del año pasado, en Ecuador también hay reportes de orcas, pero es una suerte verlas”.

Desde su Museo de Ballenas, por el momento con puertas cerradas, Ben Haase, un holandés que se dedica al estudio de estos mamíferos en Ecuador cuenta que sí es increíble ver un tiburón ballena. Él ha visto tres en su vida, “pero te aseguro que ver una ballena es aún más impresionante”.

En estas semanas de ausencia de turistas y de actividad en el mar, pescadores han registrado la presencia cercana de cetáceos como ballenas y delfines en las costas de Manta, Ayangue, Monteverde y Salinas. “No considero que sea nada especial”, dice Haase.

En Ecuador hay 6 especies registradas de ballenas. Las jorobadas –que migran por aguas frías para reproducirse– llegan entre mayo y octubre, pero según Haase, de diciembre a abril hay una ballena denominada “tropical” que es más o menos común en el Océano Pacífico.

“Como no están las jorobadas puede ser que se acerquen más a la costa”, explica.

En el caso de los delfines, que sí residen en aguas tropicales, dice que de no saber su especie, no es posible obtener una hipótesis sobre su cercanía a la orilla.

La presencia de delfines y cetáceos en general está mediada por la presencia de otras. No temen tanto al ser humano, pero tampoco buscan la costa para encontrarlo, hay factores que cambian las corrientes y las condiciones de su ambiente”, dice Ben.

En otras palabras, es común que los delfines se aproximen en busca de comida a las costas.

Santiago, que hace quince días vio a una familia de cinco delfines a 100 metros de la orilla de Ayangue, dice que estos mamíferos comen lisas y que nunca había visto a un grupo tan próximo al lugar en el que se estacionan los botes de pesca. “Estaban correteando su comida”, dice el buzo.

“Puede ser que haya algunos cambios, que el agua esté más limpia en estas semanas, y así aparecen peces que nunca se han visto, eso indica que la naturaleza tiende a corregir, a ocupar de nuevo un espacio en el ecosistema, pero tal vez ha pasado muy poco tiempo para que esto sea una tendencia”, dice el holandés más conocido como Benito.

Lo que sí cree este estudioso de los mamíferos acuáticos es que esta pandemia, sin querer sonar duro, sí parece ser una selección darwinista de los más fuertes “y nos duele, pero no podemos hacer mucho”. (I) 

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media