La noche del 10 de agosto se realizó una marcha en contra de la administración del alcalde de Huaquillas, Ronald Farfán. Al finalizar la protesta, se registraron desmanes, quema de llantas y agresiones en contra de los uniformados que custodiaban el Cabildo.

La policía ingresó al Municipio, donde se encontraban supuestos simpatizantes del burgomaestre. Fueron detenidas 17 personas que presuntamente poseían armas cortopunzantes y explosivos.

El alcalde de Huaquillas manifestó que la marcha dejó de ser pacífica para convertirse en una batalla campal entre los marchistas y la Policía, que tuvo que desplegar todo su esfuerzo para repeler la furia de los manifestantes.

Farfán dijo, en declaraciones a radio Onda Sur 95.5, que el día de la marcha pidió al Intendente de Policía que se realice un barrido total en el interior del Cabildo debido a que existían amenazas de boicot de empleados de la anterior administración municipal.

“A partir de hoy habrá seguridad permanente en el Municipio para evitar el ingreso de personas que intentan  ilegalmente tomarse la entidad municipal”, dijo.

Señaló que también se han conformado comisiones que se queden a cargo del Ayuntamiento, mientras él cumple con gestiones fuera de la ciudad.

En los últimos días el palacio municipal ha permanecido custodiado por un grupo uniformado.

“La oposición está arrepentida de haber marchado la noche de ayer (10 de agosto) porque le fue mal, la gente no salió a respaldar a los políticos de la oposición que carecen de liderazgo, que nada tienen que hacer en la política local porque ya gobernaron en buenos tiempos la ciudad”, acotó.

No es la primera vez que se generan incidentes en contra del burgomaestre. En días atrás fue atacado con un garrote por un supuesto opositor de su administración, dejándole una herida profunda en su cabeza.  

Farfán fue auxiliado por miembros de la Policía Nacional y trasladado hasta el hospital Básico de la ciudad fronteriza.

Según versiones de los que presenciaron el ataque, el agresor intentó propinar varios palazos al alcalde, con el objetivo de herirlo de gravedad, pero no pudo conseguirlo por la rápida acción de los que le acompañaban. (I)