Adquirir un cilindro de gas en Machala se ha convertido en una odisea para los ciudadanos. Los consumidores afirman que estos han desaparecido de las distribuidoras y, en otros casos, se los quieren vender a precios superiores a los autorizados.

Gina Calderón salió ayer con su bombona vacía a las 07:00 y hasta las 11:00 no podía encontrar el sitio donde abastecerse.

Después decidió hacer fila en una distribuidora de las calles Marcel Laniado y Colón. “Prometieron que iban a vendernos y hasta ahora nada, no es posible que tengamos que vivir esto todos los años”, dijo indignada. Mientras, en Puerto Bolívar, varios barrios se quejaron porque el carro repartidor no llegaba.

Norma Reyes, quien vive en la ciudadela Venecia del Mar, aseguró que el vehículo  no aparece desde hace un mes.
Lo mismo sucede en barrios aledaños, como el Wilson Franco, Virgen del Cisne, Atahualpa, 4 de Abril, Acapulco, etc., donde las familias buscan con la bombona en el hombro el hidrocarburo en las diferentes distribuidoras.

La Agencia de Regulación y Control Hidricarburifero (ARCH) de El Oro, afirmó que son los acaparadores los que  causan la escasez.

César Bravo, director de esa entidad, anunció operativos para detectar los sitios en donde se acumulan los cilindros. “Tenemos identificadas las zonas donde existe una mayor cantidad de tanques. Estamos realizando un monitoreo permanente con 16 funcionarios solo en Machala para establecer quiénes son los distribuidores que se están prestando para abastecer a estos puntos de acaparamiento”, indicó.

A pesar del anuncio, las filas y la disputa por conseguir un cilindro continuaba hasta la tarde de ayer. “Este es un problema de casi todos los días, la típica viveza criolla de parte de los bodegueros que se dedican a comercializar el producto. Dicen que no hay, pero es mentira, ya que se dedican a vender a los tricicleros y camioneros que revenden el producto a $ 3,50”, dijo un ciudadano, que desde el lunes no puede adquirir el GLP subsidiado.

La falta de gas empieza a ser notoria. En los locales de distribución hay largas columnas de personas con sus cilindros vacíos, esperando por el producto, que se termina apenas llega.

Bravo comentó que existen denuncias de las áreas donde no está llegando el gas. “Justamente vamos a responder a esos requerimientos específicos. Por otro lado, hago un llamado a los dueños de los restaurantes para que no consuman los tanques del tipo doméstico sino los de tipo industrial”, mencionó.

El pasado martes, Bravo se reunió con los comisarios de Machala y de Puerto Bolívar para que contribuyan a controlar a los acaparadores. “De 20 casas, 18 tienen gas. Eso quiere decir que no hay desabastecimiento, es muy difícil conseguir la bombona, pero eso ya lo estamos trabajando”, manifestó.