El ambiente, el paisaje de las parroquias del sur de Azogues, sumado su cercanía a Cuenca, han hecho que en estos últimos años, sean los atractivos para la construcción de viviendas primarias o de segundo tipo, incluso de una importante infraestructura educativa.

Según Pablo Abad, director de planificación del Municipio de Azogues, la tasa de crecimiento anual de la ciudad en los últimos años ha sido de 1,5%, por lo que el crecimiento de la ciudad es entendido desde el punto de vista de dispersión del suelo. Azogues tiene 1.300 hectáreas de área urbana divididas en 7 sectores, según Abad, es un área suficiente para el futuro de la ciudad, en donde existe alrededor de un 40% de espacio libre.

Únicamente el área histórica de la ciudad tiene una determinada altura y densidades poblacionales, mientras que conforme se va saliendo del centro se forma una estructura dispersa que de acuerdo a los procesos de conurbación, el área urbana de la ciudad está cercana a parroquias que han tenido un gran desarrollo en los últimos cinco años.

El desarrollo geográfico de la urbe ha provocado que sus zonas de crecimiento sean hacia el sur de la ciudad, donde se ubican las parroquias de Borrero (Charasol) y Javier Loyola (Chuquipata), específicamente por la vinculación con Cuenca. En estas parroquias los procesos de conurbación están enfocados en la línea de conducción vial, por mantener dos vínculos fundamentales en su conectividad con Cuenca: la autopista y la Panamericana. Sin embargo también, en el caso de la parroquia Guapán, ubicada a dos kilómetros, en la parte norte del cantón, se ha vuelto difícil distinguir lo urbano de lo rural. En este caso por los procesos de migración internos al cantón desde las parroquias orientales hacia el sector norte de la ciudad, por las fuentes de empleo que genera la fábrica de cemento.

Obras aceleran crecimiento de Azogues

La matriz de la Secretaría Nacional del Migrante, la Universidad Nacional de Educación y la ampliación y reconstrucción de la avenida 16 de Abril, y en las próximas semanas la ampliación de la autopista Cuenca- Azogues, son obras públicas que, según sus habitantes, potenciarán el crecimiento del sector. En el sector de la Playa se levanta el edificio de la Senami cuya inversión supera los 8 millones de dólares, y a través del proceso de relocalización personal de Quito vendrá a vivir en la urbe. A 15 minutos de la zona, en la parroquia Javier Loyola, la inserción del complejo universitario (UNAE), dará acogida a 7.500 personas en 2017.

1.300
hectáreas de área urbana tiene la ciudad de Azogues, que están divididas en siete sectores

Mientras que por el desarrollo de la parroquia Borrero y al ser una zona de crecimiento, se construye la avenida 16 de Abril, que se convertirá en el enlace directo con la parte sur de la urbe. Según el director de Planificación, estas obras establecen un giro distinto al previsto en el Plan de Ordenamiento Territorial, lo que complica la previsión del crecimiento de la ciudad que provoca que deban definirse nuevas políticas urbanas.
“Eso complica a la administración de la ciudad porque tiene un área urbana lo suficientemente generosa y la extensión a las parroquias significa la necesidad de disponer de recursos para la infraestructura básica que es realmente un tema de complicación”, dijo Abad.

Motivo por lo que dentro del POT, se prevé que el crecimiento mayoritario de la ciudad sea a tender a su consolación en el área urbana, sin embargo eso no restringe la realidad vivencial en la integración del territorio y que, según Abad, de alguna manera es controlada por el tema de la falta de abastecimiento de agua e instalaciones sanitarias. Sin embargo, esto no impidió que Pablo Saquicela, hace cinco años, haya dejado el centro de Azogues para irse a vivir en Javier Loyola por todas las facilidades que representa.