El Municipio de Machala avanza con el reemplazo del viejo acueducto de asbesto-cemento con el de hierro dúctil. La obra tiene 70% de avance y su costo alcanza los $ 11 millones.

El alcalde de la ciudad, Carlos Falquez, explicó que el acueducto empezó a construirse desde la parroquia El Cambio hasta la avenida Édgar Córdova Polo, con 2 líneas de conducción de 5,5 km cada una.

La Empresa de Agua Potable y Alcantarillado Aguas Machala EP consideró la obra como una prioridad para mejorar el abastecimiento en toda la ciudad.

Actualmente Machala sufre de constantes cortes del líquido. La capital orense ha sufrido cortes de agua de hasta una semana.

Falquez considera que con la instalación de la nueva tubería se mejorará en parte el abastecimiento.

Según Falquez, al concluir este proyecto, se prevé empezar con la regeneración de la avenida que servirá de conexión con la terminal terrestre y ruta para descongestionar el tráfico de ingreso y salida de la ciudad.

Además del incremento de la presión de agua, con la nueva tubería se eliminarán las pérdidas por tomas irregulares, pues habrá mayor control y regulación de nuevas conexiones; asimismo, se evitarán roturas y reparaciones en los tramos sustituidos.

Hugo Armijos, gerente de la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado, sostiene que Machala es una de las ciudades donde existen más conexiones clandestinas. Explica que el ducto cruza fincas bananeras y precisamente en esos lugares se rompen las tuberías y realizan conexiones no autorizadas.

Reina Valarezo, presidenta del barrio Puerto Grande, se mostra optimista con la obra. “Queremos que llegue el agua a nuestro sector, sabemos que la presión mejorará”.  

Machala tiene 37 km de tubería de asbesto-cemento, material que es considerado nocivo para la salud de los consumidores, por ello el Cabildo busca el financiamiento para el cambio total de la tubería.

Paralelamente a la instalación de la tubería para agua potable, la Alcaldía realiza obras complementarias de alcantarillado. Los barrios del este serán los más beneficiados. En la zona se construye un ducto cajón de 1.600 metros, que servirá para encauzar las aguas servidas y pluviales de la avenida Ferroviaria y zonas aledañas. (I)