En la actualidad, las drogas se han vuelto muy ‘populares’ en la sociedad. Los adolescentes las prueban muchas veces por curiosidad, sin saber que están cometiendo el peor error de sus vidas.

Las drogas pueden hacer que la persona que las consuma se sienta bien (lo que es un engaño) por un momento, sin embargo a la larga provocan un gran daño al organismo y al cerebro.
Algunos adolescentes creen que las drogas les permitirán pensar con más claridad, ser más populares o  mantenerse más activos. Otros, simplemente sienten curiosidad y piensan que si las prueban una sola vez no les sucederá  nada malo.

También hay quienes las consumen para pertenecer a un grupo o, incluso, para llamar la atención de sus padres.

José (nombre protegido) es un joven de 15 años que cursa el segundo de bachillerato de un colegio de Manta y el motivo que lo llevó a consumir drogas fue su soledad.

“Me sentía solo en mis problemas familiares, llegaron amigos y me dieron a probar. Lamentablemente, los jóvenes crecen sin saber entender y solucionar los problemas que se presentan en la vida, además está la sociedad consumista, que pone, en primer lugar, el obtener dinero para luego comprar bienes. En eso se pasan la vida, dejando de lado las relaciones familiares”, dice el adolescente.

Para José las drogas son una vía de escape, pero cuando el efecto desaparece “duele saber que los sentimientos y problemas siguen allí o han empeorado”.

Indica que quiere salir del mundo de las drogas, al que ingresó hace menos de un año. Al momento que consume, piensa en la persona ausente, y dice que si pudiera regresar el tiempo no lo volvería a hacer, pero lamentablemente sabe que no se puede cambiar fácilmente la realidad, reconoce que se encuentra atrapado en el mundo infernal de las drogas.

Para evitar el consumo de drogas, la Policía Nacional realiza charlas preventivas en los colegios.