El programa nacional denominado Eficiencia Energética para la Cocción por Inducción y Calentamiento de Agua con Electricidad (PEC), que impulsa el Gobierno Nacional como parte del cambio de la matriz energética desde inicios de este mes, se viene aplicando en la región centro de manera satisfactoria.

El objetivo principal de este plan es sustituir el uso del gas licuado de petróleo (GLP) por electricidad para uso doméstico, tanto para la cocción de alimentos como el calentamiento de agua, a través de la utilización de cocinas a inducción eléctrica en lugar de las típicas cocinas que funcionan con gas.

El tiempo para la aplicación del plan empezó a correr desde el 1 de agosto y finalizará en julio de 2016.

Esto priorizaría el uso eficiente de las energías renovables que tiene el Ecuador, de las cuales la eléctrica es la más opcionada por la presencia abundante de reservas y fuentes hídricas en toda la nación.

Tanto en Riobamba, Latacunga y Ambato, las empresas eléctricas ya han puesto a disposición de sus clientes, a través de sus portales web, la oportunidad de solicitar (en el caso de no tenerlo) la instalación del medidor de 220 voltios  y del circuito interno de este voltaje, en el caso de ya tener un medidor de esta capacidad, ambos elementos necesarios para el funcionamiento de este tipo de cocinas.

El interés de la colectividad por este tema es creciente, pues la aplicación de este programa implica ciertos cambios y modificaciones en el sistema eléctrico de cada hogar así como en el de cocción.

¿Cómo funciona?

Lo primero que se debe tener en cuenta para la aplicación del programa en cada hogar es verificar si el medidor eléctrico instalado es de 220 voltios, pues es necesario que este tenga dicha capacidad voltaica para poner en marcha la cocina a inducción. Para esto se debe solicitar a un técnico de la empresa eléctrica de la  ciudad de residencia, una visita para dicha tarea, además de una inspección de la acometida, medidor del suministro y circuitos eléctricos del hogar.

En el caso de Ambato, los usuarios pueden solicitar este servicio en www.eeasa.com.ec, Latacunga en www.elepcosa.com y para Riobamba, los clientes pueden hacerlo en www.eersa.com.ec.

Si el medidor es de 110 voltios, el cliente puede pedir a la empresa eléctrica la instalación de un medidor del doble de voltios y la habilitación de la acometida, que es la instalación secundaria que llevará la electricidad desde el contador al tomacorriente, del cual se tomará la electricidad para el funcionamiento de la cocina nueva.

De no ser el caso, los técnicos de la empresa distribuidora de energía  deberán instalar tan solo la acometida cerca del electrodoméstico nuevo.

Adquisición de cocinas a inducción

Jaime Astudillo, gerente de la Empresa Eléctrica Ambato Regional Centro Norte (EEASA), explicó la forma correcta y los lugares autorizados donde las personas interesadas deben solicitar una cocina a inducción eléctrica.

“La adquisición del electrodoméstico es similar al de las refrigeradores eficientes que se vienen obteniendo a través del Plan Renova. Hemos triangulado el financiamiento en 3 partes: casas comerciales que las venden, cliente y la empresa eléctrica. Cuando el interesado haya escogido la cocina del modelo, marca y número de quemadores de su elección en una casa comercial, lo tendrá que notificar a la empresa eléctrica de su ciudad, esta verificará si dicha persona es usuaria del servicio eléctrico y autorizará al almacén la entrega de la cocina. Después de la instalación y de verificar el uso para cocción de alimentos, automáticamente el cliente ingresa al plan nacional de incentivo”, dijo.

Dicho plan, añadió, consiste en otorgar una franja mensual de 80 kilovatios por hora (kW/h) a los usuarios del servicio, de manera gratuita. Estos serán suficientes para cocinar los alimentos de una familia de 4 a 5 personas durante 30 días.

El programa busca introducir aproximadamente 3 millones de cocinas eléctricas de inducción en igual número de hogares, desde agosto de 2014 hasta julio de 2016.

Adicional a la cocina, el cliente tiene la oportunidad de solicitar en la casa comercial, junto con el electrodoméstico, un juego de ollas. Los precios de la cocina de inducción varían desde $ 156 hasta $ 696, según la marca y el modelo. Existen modelos de 2 zonas, 3 zonas, 4 zonas sin horno y 4 zonas con horno, que se podrán adquirir con financiamiento del Estado hasta julio de 2016, hasta 36 meses de plazo y pagos a través de la planilla de consumo de energía eléctrica. También podrán pagarse de contado, con una tarjeta de crédito, débito o crédito directo.

Diferencias básicas

La principal diferencia entre una cocina eléctrica tradicional con una cocina de inducción eléctrica, es que la primera utiliza resistencias eléctricas para calentar la superficie y luego calentar los recipientes de cocción: ollas, sartenes, cazos. De otro lado, la cocina de inducción calienta directamente los recipientes en un solo paso, por lo que es mucho más eficiente y permite un enorme ahorro de energía.

Julio Fernández, técnico electricista de Ambato, explicó algunas ventajas que este nuevo sistema de cocción tiene. “Indudablemente el sistema de inducción es más seguro porque se eliminan en gran proporción los riesgos de fugas, intoxicaciones y explosiones, a la par se minimizan los peligros de quemaduras e incendios. También es importante mencionar que la vitrocerámica, como también se conoce a esta clase de cocinas, es más fácil de limpiar porque solo se necesita pasar un paño húmedo sobre la superficie, pues los alimentos derramados no se pegan”, dijo. Fernández aseguró, además, que este sistema es más eficiente porque aprovecha el 85% de la energía mientras que el sistema de gas aprovecha solo el 40%.

Estadística

En la actualidad 9 de cada 10 viviendas en el Ecuador utilizan GLP. Esto quiere decir que un 92% de hogares a escala nacional consumen gas. Un 1% de este producto es usado por el sector transportista,   2% por la agroindustria, pesca y minería y el 5% lo usa el resto de las industrias presentes en el país.

El Ecuador se ve obligado a importar cerca del 80% de este combustible porque en el ámbito interno se produce tan solo un 20%. Puesto que el precio de venta al consumidor final ha sido mantenido históricamente bajo, el Estado asume un elevado subsidio que alcanza aproximadamente $700 millones al año.

Riobamba

Aunque las cocinas de inducción fabricadas por empresas que operan en el país aún no llegan al mercado riobambeño, la ciudadanía se mantiene en expectativa para conocerlas de cerca, mientras que las casas comerciales ya exponen algunos modelos y guardan espacio para colocar los prototipos que llegarán en próximos días. Según registros de la empresa eléctrica Riobamba, en Chimborazo existen 160 mil abonados, de los cuales 16 mil ya cuentan con el medidor de 220 voltios. Joe Ruales, gerente de dicha empresa, afirmó que “este plan se apoya en los diversos proyectos hidroeléctricos de todo el país que permitirán dotar de energía sin problema. Lo único que se cambiará es el conector de la cocina, los demás artefactos seguirán utilizando 110 voltios”.

Latacunga

Desde el 1 de agosto, en esta ciudad 20 personas de la empresa ALCOR realizan una campaña de capacitación en la zona urbana para informar sobre el cambio de las cocinas de gas por las de inducción.

Fanny Bermeo, representante de esta empresa, aseguró que los interesados deberán llenar un formulario, presentar su cédula, papeleta de votación y la última planilla del pago de la luz. “La distribución empezará desde el 15 de agosto y los costos de los electrodomésticos varían de acuerdo a su capacidad. Los hay desde $ 171 hasta $ 400”, indicó.

DATOS

En el sector residencial se consume aproximadamente el 92% del gas licuado de petróleo, 1% se usa en el transporte, 2% en el agro y minería, y 5% en a industria.

El 80% del combustible es importado porque en el Ecuador se produce un 20% del gas Licuado de petróleo. Esto genera dependencia de la energía fósil y una importante salida de divisas al exterior.

Debido a que el precio de venta del gas al consumidor final ha sido mantenido históricamente bajo, el Estado ecuatoriano asume un elevado subsidio que alcanza aproximadamente $ 700 millones al año.

Una cocina a inducción es una vitrocerámica que funciona con electricidad de 220 voltios y que es altamente eficiente porque aprovecha la energía mucho más que cualquier otra.

Esta puede calentar directamente los recipientes por inducción en vez de calentar el propio artefacto, como lo hacen las tradicionales cocinas eléctricas que están presentes en el país desde hace 40 años.

La inducción electromagnética es un fenómeno físico que consiste en la generación de corrientes eléctricas en cuerpos ferrosos, debido a la acción de campos magnéticos de frecuencia variable.

Toda olla, en cuya base se coloque un imán, podrá ser utilizada en la cocina de inducción, por lo que seguramente se podrán usar muchas ollas que los ecuatorianos poseen para la cocción normal de alimentos.

Los precios de los nuevos juegos de ollas del programa varían desde los $ 38 hasta los $ 76, según la marca y el modelo; tienen una olla grande, una mediana, una pequeña, un sartén y 3 tapas.

Las empresas calificadas para la fabricación de las cocinas del programa son INDUGLOB, KANGLE, ENERINTECO, DAMAELEC, HACEB, MABE, FERROMEDICA, FIBROACERO, ELECTROCOC, ECASA, MOTSUR, GOLDENAGE.

Los almacenes donde se podrán adquirir son Artefacta, Créditos Económicos, Japón, La Ganga, Marcimex, Megamaxi y Orve.