El consumo temprano de alcohol provoca alarma
nstituciones educativas y grupos de padres de familia de la provincia de Chimborazo se han unido con personal de la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen) y elementos de la Policía Antinarcóticos con el objetivo de frenar el consumo de alcohol entre los adolescentes.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), el inicio del consumo de bebidas embriagantes se produce antes de los 15 años en el país. Y alrededor del 80 por ciento de estudiantes de educación media consume alcohol.
El 37 por ciento de menores afirma que busca el alcohol como una forma de esparcimiento debido a que no cuenta con momentos de recreación familiar o porque en la ciudad faltan espacios y actividades para el tiempo libre.
El Colegio Edmundo Chiriboga de Riobamba es una de las instituciones que dentro de su plan de trabajo anual, tiene previsto capacitaciones para los estudiantes a fin de que conozcan el daño que les puede causar tanto el consumo de alcohol como de otras drogas.
Ángel Silva, Rector del plantel, mencionó la importancia de brindar seguridad al estudiante tanto dentro como fuera del colegio. “Como maestros y autoridades queremos capacitar a los alumnos sobre las consecuencias del consumo de drogas y alcohol. Por eso, mantenemos contacto con la Policía para evitar que en horas pico, personas ajenas a la institución se acerquen a los estudiantes y les vendan substancias ilegales”.
Además, el Departamento de Consejería del colegio aborda estos temas con los alumnos y padres de familia, según la autoridad.
Pero de acuerdo con la Dinapen, pesar de los controles y charlas en los diferentes colegios de la urbe, los chicos siguen consumiendo alcohol. “En muchas ocasiones hemos encontrado a jóvenes en estado etílico y los hemos traído hasta nuestras dependencias para que sus progenitores los retiren”, señaló Mauro Sánchez, jefe provincial de la Dinapen. El oficial añadió: “Algunos padres se dan cuenta del problema en el momento en el que sus hijos son descubiertos y tratan de ayudarlos; por otro lado, existen padres que se irritan y responden mal ante la situación de los menores”.
En Riobamba han sido identificados lugares conflictivos que se han convertido en verdaderas cantinas públicas, especialmente en las noches. Tal es el caso del Parque Infantil, Parque a la Madre, Avenida Daniel León Borja, el triángulo del barrio Rosa María y calles como la Circunvalación, Carlos Zambrano y José Veloz. En esos sitios ha crecido el número de licorerías.
En el sector del Parque Infantil, por ejemplo, a partir de los jueves en la noche, decenas de vehículos que son estacionados a lo largo de la calle Carlos Zambrano, son utilizados como espacios para consumir alcohol. Antes, los ciudadanos realizaban esta actividad en la avenida Daniel León Borja.
Para Estuardo Mancera, morador en la calle Veloz, falta control de las autoridades. “Existen bares que supuestamente deben abrir solo en la noche, pero en esa vía atienden desde temprano. Y con la fachada de tiendas de abasto o minimercados, venden libremente”, señaló.