El  14 de febrero pasado se  inauguró el nuevo Hospital General de Puyo, de nivel 2. Pero desde aquella  fecha,  la atención ha sido a  medias, porque la casa de salud se encontraba en etapa de transición: el personal fue capacitado y se produjo el traslado de algunos materiales y equipos desde la antigua edificación.

Claudia Ávila, Directora  de Salud en Pastaza, indicó que este proceso culminó y, al momento, la atención a los pacientes se realiza casi al ciento por ciento con el concurso de 226 personas, entre médicos especialistas, enfermeras, personal administrativo y de apoyo.

No obstante, los pacientes que requieren del servicio de diálisis aún deberán esperar hasta inicios de mayo para ser atendidos. En un mes más estaría listo el equipo requerido y  las enfermeras del área habrán culminado su capacitación.

Ávila indicó que ese centro de atención cuenta con  los médicos necesarios. “Hemos logrado reclutar a  profesionales de otras provincias, porque les hemos asegurado sus contratos como funcionarios públicos y con la categoría de especialistas, con un sueldo que sobrepasa los 2.400 dólares. El desarrollo que vive la provincia ha sido fundamental para que contemos con  médicos”, indicó.

El afán de las autoridades de salud es que a futuro el Hospital se convierta en docente,  donde los becados en diversas especialidades, a más de prepararse, brinden sus servicios durante un tiempo determinado. Igualmente, los internos rotativos podrían cumplir su año de residencia en ese lugar.

Entre tanto, la demanda   de atención ha crecido. En Consulta Externa, por ejemplo, se superan los 80 pacientes diarios, mientras se reciben a más de 100 pacientes al día en el área de Emergencia.

Y esta situación genera aglomeraciones y reclamos. Al respecto, la Directora de Salud  considera que todo obedece a que la ciudadanía todavía no entiende la nueva cultura de servicio médico; es decir, que antes de solicitar atención en el Hospital, todo paciente debe  acudir a los centros y subcentros de salud que existen en Puyo y los demás cantones de Pastaza.

Por otro lado, el nosocomio también afronta escasez de agua, pues la dotación que recibe al momento por parte de la empresa municipal de Puyo no es suficiente para satisfacer las necesidades diarias en ese centro de salud.

Por ello, las autoridades planean contratar tanqueros para superar la situación. “Si habilitamos las 125 camas que tiene de capacidad el Hospital, el servicio de maternidad y el de atención a niños, el agua no alcanzará para las duchas y otras necesidades (…) Esperamos que con el nuevo proyecto de agua potable que tiene la municipalidad nos habilite una red directa hacia la nueva edificación”, refirió Ávila.

Y mientras se normalizan todos los servicios en la nueva casa de salud, la antigua entrará a una etapa de embodegamiento y redistribución de sus  equipos y accesorios que serán enviados a los centros de salud de la provincia. Tras ello, a partir del próximo mes,  iniciará la construcción en ese espacio, de un moderno centro de salud materno infantil de dos plantas tipo C.