Carlos Jácome es mensajero en una empresa de electrodomésticos. Al día usa entre 6 y 8 buses para movilizarse por Quito.

El usuario afirmó que el servicio no mejora, a  pesar del convenio al que llegó el Municipio de Quito con los transportistas en febrero. “Meten demasiada gente en las unidades, la gente sigue yendo colgada en las puertas y el maltrato sigue”.

En mayo pasado, los organismos de emergencia evidenciaron el fallecimiento de un ciudadano de 45 años, quien iba colgado de la puerta del bus y se resbaló. Fue atropellado por el mismo automotor.

Magdalena Ayala, otra usuaria, manifestó que incluso no respetan las paradas. “Como meten tanta gente no miran sí la persona se bajó  y arrancan, hay muchos accidentes, el servicio sigue igual”.

El concejal Carlos Páez señaló que el bloque PAIS pidió al alcalde de Quito, Mauricio Rodas, un informe sobre el proceso.

Recordó que el Cabildo se comprometió en entregar $ 21 millones y por ello buscan verificar el efecto “en la mejora de la calidad del servicio”. También les preocupa un aparente “error” en el proceso de fiscalización. (I)