La Comisión de Movilidad tiene listo para su discusión en el Concejo de Quito un proyecto de ordenanza que regula los estacionamientos públicos y privados en el Distrito.

Patricio Ubidia, concejal por Alianza PAIS (AP) y miembro de la comitiva, espera que el tema sea incluido por la Alcaldía en las próximas sesiones del legislativo local.

Se busca, por un lado, unificar la norma capitalina en torno al tema. Por otra parte, se pretende mejorar las condiciones en las que se presta el servicio de aparcamiento. Adicionalmente, se prevé incentivar la participación de la empresa privada en la resolución del problema de la falta de plazas de estacionamiento en la ciudad.

Según Ubidia, la oferta actual cubre alrededor del 10% de las necesidades en esa materia. Los detalles de la aplicación de la ordenanza se especificarán en un futuro reglamento; sin embargo, la propuesta normativa aprobada en 2 debates por la comisión traza líneas maestras de acción.

Uno de los temas planteados es la regulación de los servicios que prestan los sitios que funcionan como estacionamiento público; esto incluye a centros comerciales, hoteles, hospitales, etc. También se establece a aquellos lugares que, en el futuro, sean acondicionados para albergar vehículos temporalmente.

Uno de ellos tiene que ver con las seguridades que prestan los aparcamientos. Tras la aprobación de la ordenanza, los propietarios y administradores serán responsables de los daños que puedan sufrir los automotores mientras se encuentran aparcados allí.

El edil de AP plantea que este aspecto podría resolverse “mediante la contratación de seguros para estar en capacidad de responder ante cualquier eventualidad”.

Los lotes o edificios deberán contar también con cámaras y otros sistemas de vigilancia que permitan garantizar la seguridad tanto de los autos como de los conductores.

El proyecto de ordenanza plantea también que los estacionamientos públicos tarifados brinden facilidades mínimas tales como contar con baterías sanitarias en buen estado para el uso de los clientes.

Otra exigencia será que haya facilidades para grupos vulnerables. Esto incluirá un porcentaje, todavía por definirse, de plazas de estacionamiento dedicadas a mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con discapacidad.

Además, el uso controlado de esos sitios de aparcamiento no sería cobrado a sus destinatarios. El control de las tarifas de estacionamiento también forma parte de las regulaciones.

La idea es que los precios que se cobren por el servicio sean los mismos en una zona de la ciudad y que estos se fijen de acuerdo con estudios técnicos relacionados con la ubicación y demanda de estacionamientos en el lugar.

Ubidia señala que un ejemplo de referencia es el parqueadero público municipal del Cadisán (centro). En el espacio, uno de los de mayor demanda en la capital, se cobra actualmente $ 0,75 la hora en el día y $ 0,90 en la noche.

Con ese antecedente, esos podrían ser los límites tarifarios en los estacionamientos de Quito. (I)