El fuego destruye 472 hectáreas

Compartieron el cariño, el arrojo ante el peligro, la profesión e incluso el riesgo durante el incendio forestal iniciado a las 13:45 del domingo en el sector de Puembo (al nororiente de Quito) y que continuaba hasta la tarde de ayer.

Según quienes lo conocieron, Jonathan Paúl Dionicio Vásquez (20 años) nunca dudó de lo que quería ser cuando creciera: bombero, al igual que su padre Henry.

Por eso, en cuanto se graduó del colegio San José La Salle quedó a la espera de la primera oportunidad para enlistarse en la Escuela de Formación de Bomberos Mayor Rodrigo Peñaherrera.

Ello ocurrió hace aproximadamente 8 meses. En el intervalo, y para no quedarse sin hacer nada, Jonathan Paúl ayudaba a su padre a conducir el vehículo con el que cubre un recorrido con personal de Fiscalía General del Estado (FGE).

Quienes fueron sus pasajeros lo describen como un muchacho alegre, responsable, centrado y con   objetivos claros en la vida.

Estos planes fueron truncados el lunes último mientras luchaba contra las llamas en la quebrada Huambe, en el barrio Mangahuanta de la parroquia rural.

De acuerdo con Christian Rivera, del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal, Dionicio y su compañero Jonathan David Nacimba Amba (19 años) fallecieron por un remolino de fuego creado por un cruce de vientos.

“Nosotros fuimos atrapados por un primer remolino con el capitán Zapata, que no pudo salir de un segundo remolino y por eso está herido; el fuego te envuelve y te puede causar daño”, afirmó Rivera.

Apuntó que es complicado combatir el fuego en la zona por lo difícil del acceso, ya que el incendio ocurre en una ladera con una inclinación de más de 60 grados; por los fuertes vientos señalados y por lo seco de la vegetación.

“Estos 3 factores más el intenso Sol y la falta de humedad provocaron que las llamas se propaguen rápidamente”, detalló el socorrista.

La tarde de ayer, la quema en Puembo se reactivó en varios focos y alrededor de 100 bomberos intentaban controlarlo.

Mientras, los otros 3 bomberos heridos en la jornada de anteayer continuaban en observación en la Novaclínica y el Hospital de Los Valles. Se trata del capitán Zapata, quien presenta quemaduras en las vías aéreas (parte del aparato respiratorio) y una lesión en el hombro; el suboficial Parra, quien tiene un trauma ocular, y Marco Bastidas (20 años), quien fue afectado por quemaduras en su cuerpo.

Los restos de los 2 fallecidos recibieron velación en una capilla ardiente levantada ayer en el Salón de la Ciudad en el Cabildo.

Los cadáveres fueron transportados, a las 11:00, desde la Comandancia General del Cuerpo de Bomberos, en el centro-norte, sobre vehículos de emergencia que recorrieron la ciudad, hasta el Palacio Municipal seguidos por compañeros y familiares.

Al paso del cortejo, la ciudadanía salió a balcones y terrazas y se apostaba en las veredas. En algunos tramos del recorrido, de alrededor de una hora, hubo aplausos de parte de la gente e incluso alguna lágrima.

Antes del inicio del cortejo, Juan Ambas, tío materno de Jonathan David Nacimba, declaró que es necesaria una investigación sobre el hecho. El hombre criticó que se hubiese puesto a cadetes a combatir un incendio de proporciones.

El personal del organismo de combate al fuego desestimó los reclamos.

Una fuente aseguró que los primeros 9 meses de instrucción de los oficiales coinciden con la preparación de los bomberos de línea y que incluso el primer módulo tiene que ver con incendios forestales.

La misma fuente añadió que los aspirantes fallecidos no se encontraban en la primera línea de fuego.

Mientras tanto, además de en Puembo, ayer hubo múltiples incidentes relacionados con fuego en Quito. Entre los sitios afectados por las llamas fueron el cerro Ilaló, El Placer, Alangasí, Cumbayá, Miraflores Alto, La Pulida, La Merced y Santa María.

Desde las 14:30, el helicóptero Fénix, de la Policía Nacional, colaboró en los barrios La Pulida y Santa María arrojando agua desde un bambi bucket (canasta transportadora).

Igual hizo un helicóptero MI del Ejército. Sin embargo, cerca de las 17:00 la canasta que transportaba la aeronave militar se desprendió y cayó sobre un edificio en la Av. Coruña y Manuel Barreto, sector La Pulida, norte de la capital. Solo hubo daños materiales.

Con el incendio ocurrido en Puembo y los otros 8 de este martes, son más de 1.400 eventos relacionados con fuego en el Distrito en la actual época seca.

Se calcula extraoficialmente que unas 81 hectáreas (ha) han sido afectadas desde el domingo en la parroquia nororiental,  con las que suman 472 ha consumidas este año en la capital.

Esto contrasta con los cerca de 1.080 incendios y conatos registrados el año pasado y las casi 300 ha consumidas en ese período.

Los daños dejados por el fuego en este año requerirían de una inversión de $ 1,5 millones, según la secretaria metropolitana de Ambiente, Verónica Arias.

De acuerdo a la institución, las llamas han afectado el hábitat de unas 25 especies de mamíferos, aves, reptiles, anfibios e insectos al consumir pastizales, pajonales, zonas de arbustos y bosques.

El ministro del Interior, José Serrano, informó vía Twitter que se activó el plan de recompensas para dar con los responsables de los incendios. Se ofrecen $ 50 mil por información que permita la captura de los implicados. (I)

Más de 300 quemas afectaron a 5 provincias      

Los desastres ocurridos desde inicios de año hasta septiembre dejan como saldo más de un millar de hectáreas de pajonales y bosques incineradas.

La cifra se desprende de los informes emitidos por la Secretaría de Gestión de Riesgos, los ECU-911 de diferentes provincias y cuerpos de bomberos.

Aún no es posible determinar qué variedades de árboles o arbustos se quemaron o cuántas especies animales murieron.

Lo cierto es que si se suman todos los incidentes, superan los 300.

Las provincias de Chimborazo y Bolívar, en su orden, son las que reportan mayores perjuicios en los campos. En la primera se incineraron 421,7 hectáreas, mientras que en la otra totalizan 400 hectáreas.

En el suelo chimboracense, las quemas mantienen en alerta a la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR) y al Ministerio del Ambiente (MAE).

Ambos organismos anunciaron que reforzarán las campañas de concienciación entre la población.

Según registros de la cartera de Estado hasta el momento se han presentado 22 incendios.

Uno de estos desastres sucedió en las áreas protegidas de la Reserva Faunística Chimborazo, sitio en el cual el fuego arrasó con 30 hectáreas de pajonales.

“Las personas en muchos de los casos son irresponsables porque dejan materiales que pueden provocar focos de incendio, por eso pedimos la colaboración”, señaló Lucio Velasteguí, miembro del Cuerpo de Bomberos de Riobamba.

En tanto, alrededor de 2 días les tomó a los bomberos de Bolívar y Chimborazo  sofocar el fuego en la zona limítrofe. (I)