Portafolio Gráfico
El Circo ruso es riesgo y sonrisas en cada segundo de su función
Los movimientos peligrosos se entrelazan con las acciones que inevitablemente se ganan las sonrisas. Sin duda, no hay quién supere o cercanamente iguale a los rusos en este tipo de arte.
Malabarismo, magia y payasos transportan a los quiteños a un mundo irreal que, con un gran fondo musical, suben de tono y riesgo a los números hasta dejar al público paralizado.
Se trata de dos horas de entretenimiento que ofrece el Circo Ruso, en las que no hay un minuto perdido porque el espectador se mantiene cautivo hasta que cae el telón. (I)