Una consultoría contratada por el cabildo determinó que los recursos necesarios para la obra serían el triple de lo previsto
El centro de acogida animal sigue en espera
En agosto de este año, de acuerdo con la proyección de la Alcaldía de Quito, debió estar listo el nuevo centro de acogida de animales, cuya construcción está prevista en el sector de Quitumbe (al sur de la urbe).
Aquello no ocurrió y, según denuncia el concejal Mario Guayasamín (Alianza PAIS), la edificación del espacio tampoco se hará en 2016, pues el presupuesto municipal aprobado la semana anterior no contempla recursos para ello.
Durante la sesión extraordinaria del 10 de diciembre, cuando se aprobó la proforma, Guayasamín (foto) hizo dicho señalamiento, el mismo que fue reconocido por el alcalde Mauricio Rodas.
El burgomaestre aseguró que su administración buscará el financiamiento y que no descartaba que se incluyera la obra en la reforma presupuestaria de cara al último tramo del próximo año.
No obstante, según Guayasamín, la concreción del edificio, al menos en este año, es bastante difícil.
El representante por PAIS dice que lo que ocurrió el año que concluye es que “a la Alcaldía se le cayó el proyecto”.
El también comunicador social dijo conocer que el tema de la financiación del espacio de acogida pasa por la elevación de costos de la obra que determinó la consultoría contratada por el gobierno local.
Dicha asesoría habría determinado que la construcción y el equipamiento del lugar requerirían una inversión de alrededor de $ 1,5 millones.
El presupuesto referencial manejado por el Cabildo para ejecutar la obra en 2015 era de alrededor de $ 400 mil, una cifra más cercana al costo que tuvo el espacio del mismo tipo que se construyó en la zona de Calderón (al norte de Quito).
El concejal de AP afirmó desconocer los detalles del proyecto planteado por la consultoría y cuáles serían las razones de que el presupuesto requerido prácticamente se triplicara.
De acuerdo con los planes de la administración pasada, el futuro espacio en Quitumbe tendría capacidad para acoger a 100 animales y contaría, además, con un laboratorio especializado y una veterinaria.
Además de la problemática de la elevación del monto de recursos requeridos, la ubicación del centro también tendría dificultades.
Los vecinos del terreno elegido por la Alcaldía para la construcción del lugar habrían rechazado la obra.
Las normas internacionales determinan la existencia en las ciudades modernas de un animal de compañía por cada 4 habitantes. Por ello, en el Distrito existirían en la actualidad más de 600 mil mascotas, sobre todo perros y gatos.
De esa cifra, alrededor de 160 mil estarían en situación de abandono, y para ellos estaría destinada la obra. (I)
