Comerciantes se sienten engañados por la Alcaldía

Los vendedores reubicados en el Centro de Comercio del Comité del Pueblo (al nororiente de Quito) no despegan y responsabilizan de su situación a la administración municipal de Mauricio Rodas.       

El espacio abrió sus puertas el 14 de noviembre y alrededor de 250 personas ocuparon las instalaciones, dejando atrás décadas de permanencia en la avenida Jorge Garcés, principal arteria de la zona.  

Los comerciantes buscan que el Municipio aplique medidas para paliar los problemas de poca afluencia de visitantes, inseguridad y proliferación de vendedores ambulantes en los alrededores.  

En un recorrido realizado ayer, un equipo de EL TELÉGRAFO constató la sensación de malestar.

Antes del mediodía, varios locales de zapatos, ropa, juguetería, comida, víveres, etc, estaban  cerrados, mientras que pocos clientes transitaban por los pasillos, la mayoría en las áreas de expendio de comida preparada y cruda.

Martha Pabón, quien pertenece a la sección zapatería, comentó que durante la semana vende 15 pares de zapatos, cuando hasta hace 2 meses lograba comercializar hasta 16 pares por día en la calle.

“La situación es fatal, nos la pasamos sentados, cruzados de brazos desde las 08:00 hasta la noche. La gente no entra al Centro de Comercio. Estamos desesperados, pues nosotras somos cabezas de familia”, afirmó Pabón.

De la misma manera, la comerciante de ropa María Estela Guaminango señaló que ha invertido más de $ 300 en mercadería, pero que desde hace un mes no logra recuperar el dinero, pues vende apenas  una o dos piezas por día.

En el área de vegetales, los colegas de Guaminango aseguran que han botado sus productos a la basura en repetidas ocasiones, pues al no poder venderlos se pudren.

Olga Guamán, una estilista cuyo salón de belleza se encuentra en el primer piso de la edificación, mencionó que gana $ 3 al día en el mejor de los casos.     

A esa queja la mujer añade que se debe mejorar la infraestructura del edificio con la instalación de aire acondicionado, el revestimiento de las paredes, la colocación de iluminación en la calle, etc.

Los vendedores añadieron que el Centro de Comercio del Comité del Pueblo no cuenta con seguridades y que ya existen casos de personas que han sufrido pérdidas.   

La mañana de ayer, Marco Murillo, director de la Agencia de Control Distrital de Comercio, estuvo en el sitio.

Los dirigentes le solicitaron que se cumplan los ofrecimientos de apertura de locales ancla como bancos y dependencias municipales, así como la instalación de cajeros automáticos, como medidas para atraer a clientes.

Morillo señaló que todos los días dialoga con los comerciantes y responsabilizó del bajo nivel de ventas a la crisis económica. El funcionario aseguró que el Municipio ha invertido $ 85 mil en publicidad, al tiempo de puntualizar que su presencia se debía a la organización de mingas de limpieza.

Ante ello, los comerciantes señalaron que si no obtienen respuestas concretas, no dudarán en repetir acciones como la protesta que realizaron el lunes ante el Cabildo.

Dijeron que se sienten desesperados y abandonados por parte de las autoridades. Como ejemplo de aquello, contaron que desde la apertura del Centro de Comercio, el alcalde Mauricio Rodas no ha visitado el lugar y ni siquiera se ha previsto una fecha de inauguración oficial del espacio.  

Por otra parte, un grupo de vendedores que ocupa la avenida Michelena (al sur) para ejecutar su labor, protesta en la Administración Zonal Eugenio, en reclamo de lo que llamaron incumplimientos del gobierno local.   

Los comerciantes del sur reclamaban porque el Municipio estaría negociando con directivas paralelas sobre la reubicación planteada para ellos a una estructura cuya conclusión estaba prevista para inicios de este mes. (I)