Vincent van Gogh es un pintor holandés conocido en todo el mundo, pero cuya fama llegó después de su muerte. Su imagen y personalidad, calificada de estrafalaria por algunos de sus contemporáneos, y su estilo al pintar lo han convertido en una personalidad artística inconfundible. Van Gogh nació el 30 de marzo de 1853 en un pueblo llamado Zundert, en los Países Bajos.

Fue hijo de Theodorus van Gogh, un humilde pastor protestante neerlandés, y Anna Cornelia, una mujer abnegada y comprensiva, quien enseñó a dibujar a Vincent. Su tío Vincent le ofreció su primer trabajo a los 16 años, como aprendiz de vendedor de arte en Goupil & Co. (más tarde Boussod & Valadon).

Es considerado uno de los máximos exponentes del Postimpresionismo, pese a lo cual únicamente vendió un cuadro durante su vida. Probablemente como efecto de la sífilis, desarrolló una enfermedad mental degenerativa. Esto produjo en su vida anécdotas como el que se cortara una oreja. Murió el 29 de julio de 1890 luego de que se disparara él mismo 2 días antes, según la versión oficialmente aceptada. (I)