La construcción de la vía Gualo - Puembo, que fue presentada por el ex alcalde de Quito, Paco Moncayo, como un  acceso alternativo al aeropuerto de Tababela, tenía fallas geológicas y habría sido de uso exclusivo para los usuarios de la terminal.

Así explicó el alcalde capitalino, Augusto Barrera, la decisión de descartar el proyecto y, en su lugar, planificar la  Vía Intervalles (VIVA).

Reiteró que la primera dificultad de la ruta Gualo era que no beneficiaba a los moradores de Cumbayá y Tumbaco, mientras que las dos rutas aprobadas ayudarán a descongestionar los valles.

Otro inconveniente del proyecto eran las complejidades geológicas. El nivel de compactación que debía hacerse en esta ruta era grande y similar a la que se hizo en el nuevo aeropuerto y a lo que se hace en la ruta Collas-Nuevo Aeropuerto.

Además requería la construcción de dos puentes sobre los ríos Guambi y Machángara y la instalación de más de 556 metros de luz, con soportes del tamaño de un edificio de 60 pisos.

Por lo tanto, uno habría sido el precio referencial y otro es el precio final que se habría cancelado por el proyecto, incluso tres y cuatro veces más.

Hay que ver el costo-beneficio social, los temas de orden constructivo y el acuerdo con los mismos técnicos de la CAF, que podían dejar insubsistente la licitación, dijo Barrera.