Más de 150 mil hectáreas a nivel nacional son protegidas de las inundaciones

Los efectos de al menos 6 tormentas fuertes que superaron los 600 metros cúbicos por segundo fueron controlados y no afectaron las provincias de Guayas y Cañar, gracias a la inversión que se ha hecho en megaproyectos hídricos que controlan y mitigan las inundaciones que se suscitan durante el invierno.

Así lo expuso el vicepresidente de la República, Jorge Glas, durante el enlace Nº 419 desde el cantón Nobol, en la provincia del Guayas.

Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), por cada dólar que se invierta en control y mitigación de inundaciones hay un ahorro de $ 9,5 en posibles afectaciones por el invierno y prevención de pérdidas en el sector productivo, vidas humanas, destrucción de centros urbanos y obras estratégicas como hospitales. 

En este contexto, el Segundo Mandatario informó sobre el funcionamiento del proyecto ‘Control de Inundaciones Bulubulu’, el cual será inaugurado próximamente porque está en periodo de prueba. 

La iniciativa beneficiará a más de 46 mil hectáreas y 65 mil habitantes de las provincias de Guayas y Cañar, que se ubican en los cantones El Triunfo, Marcelino Maridueña, Yaguachi, Durán, La Troncal y Cañar.  Su inversión es de $55.6 millones.

Junto a este megaproyecto hídrico existe el Multipropósito Chone; Control de inundaciones Cañar y Naranjal; Trasvase Chongón San Vicente y el de Daule-Vinces, que están a cargo de la Empresa Pública del Agua, inaugurada el año anterior y que tiene como propósito ser un gran centro de control de toda la infraestructura hídrica del Ecuador.

“Estos proyectos fueron planificados hace más de 30 años pero nunca hubo voluntad política para ejecutarlos. Lo que estamos terminando es el ‘Control de Inundaciones-Cuenca Baja’ que protegerá 150 mil hectáreas, añadiéndose a los otros proyectos. Es importante porque, por ejemplo, Chone se inundaba todos los años”, manifestó el secretario del Agua, Walter Solís.

En esta misma línea, el vicepresidente mencionó la construcción del Poliducto Pascuales-Cuenca, que tiene un avance del 70% y que permitirá impactar en la distribución de combustibles beneficiando a 2,6 millones de ciudadanos. La obra  transportará gasolina, diésel, gas licuado de petróleo y, en el futuro, etanol para camiones.

“Con esta obra tendremos una distribución eficiente y segura para transportar este tipo de combustibles que siempre tiene sus riesgos y produce contaminación”, expresó Glas y aseguró que el proyecto que tiene 210 kilómetros genera empleo a 3.000 personas. Este poliducto no utilizará hidrocarburos sino energía renovable.

Asimismo, Glas recordó que el gobierno ha hecho grandes esfuerzos por generar energía eléctrica propia en el país, por lo que se están construyendo hidroeléctricas. Una de ellas es Coca Codo Sinclair, que generará 1.500 megavatios y que actualmente finalizó los trabajos subterráneos.

No obstante, esto no puede ir acompañado sin un estricto control de calidad en el servicio eléctrico nacional, por lo que se ha invertido $ 200 millones y se están construyendo 20 centros de control en diferentes provincias.

Salvaguardias

El vicepresidente se refirió a las nuevas tarifas de taxi que el Municipio de Quito aplicó, y cuestionó que se haya topado el tema de las salvaguardias para realizar este cambio, pero que una vez que se excluyó de esta medida a las llantas importadas no se modificó el precio.

“Esto es facultad del Municipio y tenía que hacerlo, los montos tendrán que explicárselos a los ciudadanos de Quito que son los usuarios del transporte. En el Concejo metieron el tema de las salvaguardias (...) si alguien miente señalaremos que ha mentido”, señaló Glas. (I)