La pobreza pasó del 24% al 22% en 12 meses

“Las estadísticas nos demuestran que pese al año difícil la pobreza sigue descendiendo”, resaltó ayer el Presidente de la República durante el Enlace Ciudadano 433 celebrado en el cantón Archidona de la provincia del Napo.

“Estamos en un nivel de pobreza (medida por ingresos) del 22%, medidos en junio de 2015, mientras en junio del año pasado era del 24%, pese al entorno económico difícil”, dijo Rafael Correa, citando los datos de un cuadro estadístico con cifras oficiales.

El Primer Mandatario destacó las cifras como “importantísimas” y llamó a comparar estadísticas de gobiernos anteriores en las que “en las épocas (económicamente) difíciles la pobreza subía, la inequidad aumentaba porque la carga del año difícil era para los más pobres”.

Y nombró como ejemplos las medidas que adoptaban tradicionalmente sus antecesores para tratar de superar las crisis: alza de tarifas de servicios básicos, combustibles, pasajes.

El Jefe de Estado hizo hincapié, además, en que dicha estadística deja sin piso las aseveraciones de los opositores respecto a que medidas como el establecimiento de salvaguardias para los productos importados, la limitación de utilidades y la eliminación del subsidio a las pensiones jubilares afectan a los más pobres.

“Han sido medidas quirúrgicas destinadas a gasto suntuario, gasto innecesario (como las salvaguardias), para los que ganaban excesivas utilidades en lugar de recibir mejores sueldos, quitar subsidios innecesarios al IESS”.

Sobre este último punto recalcó que si la medida hubiera afectado a la seguridad social, la pobreza hubiera aumentado en lugar de seguir disminuyendo.

En esa misma línea, durante el enlace realizado en la provincia amazónica, el titular del Ejecutivo mostró cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), según las cuales el Ecuador es uno de los países con menos deuda externa en la región.

Correa atribuyó esta situación a la renegociación de la deuda realizada por su Gobierno y dijo que el indicador macroeconómico se ha mantenido en 22,4% del Producto Interno Bruto (PIB).

“Somos de los países menos endeudados de América Latina”, dijo el presidente Correa, al mismo tiempo que recordó que gracias a la “renegociación exitosa” en 2009 ese ítem bajó al 16%, “una reducción histórica”, pero que con el tiempo ha crecido y se ha mantenido en 22,4%.

Con ello desmentió otra de las aseveraciones que -dijo- repite constantemente la oposición con el fin de posicionar la idea respecto a que su Gobierno ha incurrido en un gran endeudamiento.

El Mandatario recordó que durante la época en que imperaba el neoliberalismo, en 1992 y 1993, el nivel de deuda pública en el gobierno de Sixto Durán Ballén fue del 65,4%, con Abdalá Bucaram del 60%, con Fabián Alarcón del 53% y con Jamil Mahuad del 81%, gobierno en el que se desató el feriado bancario.

A partir de ahí -señaló- se empieza a controlar el tema de la deuda y ocurre un descenso durante el gobierno de Gustavo Noboa 54%, con Lucio Gutiérrez 40%, con Alfredo Palacio 29%, hasta alcanzar el citado 22,4% en el presente.

Ecuador no tiene un gran peso tributario

También atacó el planteamiento de que en el país se estén cobrando muchos impuestos.

Y para demostrarlo destacó que, por ejemplo, el porcentaje del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en Ecuador es del 12%, mientras que en países como Colombia y Perú son del 16% y 18%, respectivamente.

“Los productos de la canasta básica, la inmensa mayoría no paga IVA, las medicinas no pagan IVA, los alimentos no pagan IVA, pero le hacen creer a los pobres que es un país de altos impuestos”, dijo el Jefe de Estado.

Con las deducciones del Impuesto a la Renta (IR) por alimentos y educación de las personas que ganan más de $ 20.000 anuales (unos $ 2.000 mensuales) no pagan impuesto; además, la clase media baja no paga impuesto a la renta, explicó Correa, quien dijo que el hecho de que las personas de clase alta tengan que pagar tributos es “justicia social” en todo el mundo.

Del mismo modo, el Presidente de la República criticó a quienes hoy se indignan por el proyecto de Ley de Herencias y afirmó que quienes se oponen a él son personas ricas que sienten afectado su bolsillo. Asimismo, desmintió que dicho proyecto genere algún tipo de afectación a los pobres y la clase media.

Y recordó que el expresidente socialcristiano León Febres-Cordero aplicó, debido a la crisis económica que vivía el país en 1986, una tabla de impuesto a la herencia en la que “se cobraba más a los pobres y menos a los ricos”.

Y comparó dicha norma, impuesta mediante un decreto-ley tras la oposición del entonces Congreso, con su proyecto. Con la tabla socialcristiana alguien que heredaba bienes o dinero valorados entre 100 y 150 salarios básicos unificados debía pagar 14%; en tanto que en la propuesta de Alianza PAIS, una herencia de ese tipo pagaría 2,5%.

El exceso gravable arrancaba, con la ley socialcristiana, en los 10 salarios básicos con un impuesto del 6%; sobre los 100 salarios básicos se pagaba el 12%. Mientras que el último segmento arrancaba con 2.000 salarios (35%). (I)