A la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) le preocupa las pretensiones que tiene la ‘vieja derecha’ por concentrar nuevamente el poder. Así lo manifestó ayer su presidente, Jorge Herrera, durante la reunión de organizaciones sociales de izquierdas que aglutina a la Ecuarunari, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Frente Popular y Federación Médica, estudiantes y una fracción de jubilados.

La Conaie ha incrementado sus contactos políticos desde la semana pasada, de cara a la reunión convocada para mañana por Pachakutik para reunir en su sede a los partidos políticos de oposición. Para Herrera, es difícil pensar en una congruencia de discurso y de pensamiento con la derecha cuando -a su criterio- ellos solo buscan garantizar sus propios intereses.

Para precautelar los postulados de la izquierda, la Conaie asistirá a la convocatoria que la coordinadora de PK, Fanny Campos, hizo a principios de año para que “todos los partidos y movimientos dejen a un lado el tema electoral y se sienten a reconsiderar qué país quieren después de las elecciones”.

Según Herrera, la Conaie no avalará cualquier acuerdo ni alianza, sino que defenderá y ratificará “la línea política por la que Pachakutik se debe encaminar”. Ese día se reunirán en el parque El Arbolito desde las 09:00 para movilizarse hacia la sede de PK en Quito. CREO, Avanza y Sociedad Patriótica han confirmado su asistencia.  

La semana pasada, el líder de la Ecuarunari, Carlos Pérez Guartambel, habló de la posibilidad de sancionar al prefecto de Morona Santiago, Marcelino Chumpi, por acudir a la cita de la oposición en Cuenca.

Al respecto, Ramiro González, presidente de Avanza, manifestó ayer que aún habrá que esperar si se aplican esas sanciones y cree que la dirigencia indígena no topará “un tema interno en una convocatoria dirigida a todos los actores políticos”, pero respeta su posición porque es parte de la democracia.

“Yo hablé hoy (lunes) con Fanny Campos y me ha dicho todo lo contrario. Estuvimos en un acto en el Centro de Exposiciones Eugenio Espejo (de Quito) y dice que la mayoría del sector indígena quiere un diálogo con todos los sectores, que quieren sumarse. Ella me dijo que tanto Pérez Guartambel como Jorge Herrera tienen una posición, pero que el resto de los movimientos indígenas tiene otra. Entonces esto recién es el calentamiento y ya veremos cómo se dan las cosas”.

Lineamientos

¿Pero qué defenderá la Conaie este miércoles? Herrera mencionó algunas propuestas: la educación bilingüe; el derecho a las autonomías territoriales; su lucha contra las empresas mineras y petroleras,  y el extractivismo; promover el turismo comunitario; el ejercicio de la justicia indígena; el derecho de los jóvenes a definir su carrera profesional; la nacionalización de las telefónicas; la redistribución de los medios de comunicación; y la defensa de los derechos de los trabajadores para que accedan a mejores sueldos y a la contratación colectiva.

Esos objetivos -según Herrera- no coinciden con los de la derecha. “No vamos a pensar que ellos (la derecha), por ejemplo, van a aceptar que no haya extractivismo. No entiendo el sentido de la presencia de los otros partidos y movimientos, principalmente de derecha. El miércoles, estén o no estén ellos, el movimiento indígena continuará con la lucha histórica y con un proyecto económico, político y social que sea favorable a todos los ecuatorianos”.

Con esto coincidió el coordinador de la Federación Única Nacional de Afiliados al Seguro Social Campesino (Feunassc), Delfín Buelva, quien se mostró preocupado con las declaraciones de Campos y del prefecto de Morona Santiago, Marcelino Chumpi, ya que el “unir por unir no va a resolver los problemas de los más pobres”. Por eso la posición de ellos es que la unidad solo será con las organizaciones sociales de centroizquierda.

Por su parte, el presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Pablo Serrano, tiene otra visión sobre por qué no establecerán alianzas. “No podemos pactar con Avanza cuando el principal culpable de que se eliminen los derechos de los jubilados es Ramiro González. Tampoco con Lasso, bajo ninguna circunstancia, porque él fue uno de los gestores del paquetazo económico que sufrió el país en 1999; y cuando Jaime Nebot representa a la ultraextrema derecha que pretende mantener un modelo económico neoliberal. No podemos olvidar”.

Las centrales sindicales también acudirán a la convocatoria abierta de la coordinadora de Pachakutik con la finalidad de “desenmascarar” las intenciones de la derecha.

Para Nelson Erazo, presidente del Frente Popular, el momento en que se expongan propuestas como que el trabajador debe cubrir con su salario el costo de la canasta familiar o el justo pago de utilidades, el exbanquero Lasso no estará de acuerdo.

Con respecto a las declaraciones de Gilmar Gutiérrez, dirigente de Sociedad Patriótica, sobre que el colectivo estaría favoreciendo al correísmo al tratar de evitar una unidad total, Erazo recordó que el gobierno de Lucio Gutiérrez firmó una carta de intención con el  FMI, lo que lo obligó a congelar salarios y elevar el costo de los combustibles.

Entonces -según Erazo- es claro que no existe una oposición dividida, sino que existen 2 tipos: una burguesa y otra popular. (I)

DATOS

El presidente Rafael Correa consideró positiva la reunión de la oposición porque demuestra al país la política del pasado, cuando se juntaban el agua con el aceite.

El dirigente de CREO, Guillermo Lasso, aseguró que no asistirá a ningún encuentro donde esté Ramiro González por considerarlo corresponsable de la situación económica del país.

El 18 de enero, representantes de SUMA, PSC, Concertación, Avanza y Podemos se reunieron en la sede de Pachakutik (PK). Acudió Salvador Quishpe. Al siguiente día nació la Convergencia Democrática en Cuenca y el prefecto de Morona Santiago, Marcelino Chumpi, (PK) acudió.

El 21 de enero, la coordinadora de Pachakutik, Fanny Campos, aunque fue invitada, no participó en la Asamblea ampliada de la Conaie.