El nuevo Superintendente de la Información y Comunicación tentativamente será designado hoy, durante la sesión del pleno del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs).

El periodista Carlos Ochoa Hernández, quien lidera la terna enviada por el Presidente de la República, es el más opcionado para ocupar este cargo, tras disputarlo con los comunicadores sociales María Elena Aguirre y Wilman Sánchez.

Sin embargo, Fernando Cedeño, presidente del organismo, señaló que esto dependerá de la discusión  que se genere entre los consejeros durante la sesión.

Según el artículo 56 de la LOC, entre las atribuciones del Superintendente de la Información están  fiscalizar, supervisar y ordenar el cumplimiento de las disposiciones legales y reglamentarias sobre los derechos de la comunicación.

Además, tendrá que atender, investigar y resolver las denuncias o reclamos formulados por las personas naturales o jurídicas, a través de sus representantes, en materia de derechos de la comunicación.

Finalmente también podrá aplicar sanciones establecidas en el marco de la LOC y de la regulación que emita la autoridad reguladora.

La nueva autoridad será el noveno integrante de  la Función de Transparencia y Control Social, donde están agrupados los organismos de control y aquellos que garantizan los derechos.

Entre las últimas tareas de la Función de Transparencia estuvo la elaboración del Plan Nacional de Lucha contra la Corrupción.

El nuevo superintendente tendrá que crear su nueva estructura orgánica funcional, siendo un ente desconcentrado, para que se le asigne un presupuesto del Estado. Es decir que deberá crear toda la institucionalidad ya que parte desde cero.

La designación ocurre luego que el Cpccs rechazara las cuatro impugnaciones que fueron presentadas en contra de Ochoa por parte de los legisladores Abdalá Bucaram Pulley (PRE), Lourdes Tibán (PK) y Andrés Páez (CREO). A ellos se sumó el ciudadano Néstor Marroquín.

Los cuatro aseguraron que Ochoa no tenía probidad ni independencia para ser una autoridad reguladora. Lo acusaron de  no proceder con imparcialidad, neutralidad, ni objetividad.

Frente a esto, Cedeño aclaró que la Ley Orgánica de Comunicación (LOC) no prohíbe estos condicionamientos por lo que no hay  conflicto de intereses. “Quien elabora la terna es el mismo Presidente de la República y no va a poner a alguien que considera su enemigo”, cuestionó.

No se aceptaron las impugnaciones porque estas hacían aseveraciones no reales como cuestionar el tiempo que registra el título universitario de Ochoa en relación al requisito de tener diez años de experiencia profesional, señaló Cedeño.

Para él, este tema fue “saldado” una vez que se aceptó la terna ya que en esa instancia un equipo revisa si los postulantes cumplen los requisitos legales. A esto se sumaron algunas quejas contra el proceso y no dirigidas a los postulantes.

Con algunas impugnaciones se trataron de localizar vacíos en la norma legal y en la Constitución. Sin embargo, el Cpccs  aclaró que el proceso de designación es imperativo, ya que consta en la LOC.

Concurso para defensores de audiencias

Otra tarea del Cpccs relacionada a la LOC está  impulsar los mecanismos de participación para que ciudadanos se postulen al cargo de  defensores de las audiencias de los medios de comunicación de alcance nacional. Así lo ordena el  artículo 6 de la norma antes citada.

El  defensor debe ser veedor en  los medios de comunicación  para que estos  cumplan con lo que determina la LOC. Su designación será mediante concurso público de méritos y oposición.

ENTIDAD APOYA PROCESO DE DESIGNACIÓN

La Coordinadora de Movimientos Sociales acudió ayer hasta el Cpccs para entregar un manifiesto de respaldo al proceso de designación del Superintendente de Información.

El asambleísta Rodrigo Collahuazo y titular del grupo dijo que este proceso “fortalece” la participación ciudadana y la democracia al ser un “hito” en la historia del país.

Mónica Banegas, vicepresidenta del Cpccs, recibió el documento y afirmó que tras las impugnaciones, cualquier  terna  es elegible.