Camarógrafo agredido en protesta indígena será sometido a una cirugía
“Sentí como un golpe interno pero no me dolió en ese momento, aunque empecé a sangrar en forma exagerada”, recuerda Álex Méndez Gómez, de 26 años, camarógrafo que en cumplimiento de su trabajo fue agredido por participantes de la marcha indígena de ayer jueves.
No conformes con eso, un grupo de protestantes intentaron robarle la cámara del canal en donde trabaja desde hace un año y medio (CN PLUS), pero en medio del aturdimiento la abrazó fuertemente y evitó aquello.
A las 18:30, empapado de sangre y aturdido por el golpe y los gritos de los manifestantes, Álex fue evacuado del lugar y conducido a la Clínica Colonial, en donde en primera instancia le cogieron 8 puntos en la herida que registró en la nariz, a consecuencia del impacto de una piedra lanzada por un grupo de personas, quienes ya venían amenazando a los comunicadores sociales para que no graven los actos de violencia.
“Uno de los compañeros periodistas nos advirtió que los manifestantes nos están cazando ten cuidado”, recordó, pero como tenía que cumplir con su trabajo profesional continuó con su tarea, a ratos de lado y a ratos de frente a los protestantes.
La noche de ayer, jueves 13 de agosto, Álex no pudo dormir debido a los intensos dolores, por lo que junto a su padre (Elías Méndez), quien también es camarógrafo de televisión, acudieron hasta el Instituto de Radiología ubicado en el norte de Quito, en donde tras realizarle varias radiografías el médico Guillermo Álvarez determinó de que hay que someterlo a una cirugía, ya que existe fractura en el tabique.
“El examen realizado demuestra fractura con munita de huesos nasales en su tercio distal”, señala el informe médico, por lo que a las 14:00 de hoy viernes será sometido a una operación.
Álex no identificó a su agresores que se confundieron entre los manifestantes que decían llegarían en paz a protestar en Quito.
“Me dieron con un pedazo de piedra o de adoquín mientras realizaba mi trabajo cerca a la plaza Santo Domingo (centro de Quito)”, añadió este joven camárografo.
Álex es casado y padre de dos niños. Pidió a los grupos en conflicto respetar a los periodistas y no agredirlos, ya que "solo cumplen su trabajo que les gusta y que les sirve para ganar un sueldo para mantener a sus familias". (I)
