El Museo del Petróleo, ubicado en la ciudad de Midland (Texas-Estados Unidos), recibirá desde las 08:00 de hoy a los accionistas de Chevron Corporation para la sesión anual de la petrolera estadounidense.

Esta reunión, normalmente, se llevaba a cabo en su sede oficial corporativa situada en San Ramón (California); esta vez decidieron trasladarse a otro estado, lo que provocó críticas porque se le consideró como una estrategia para evitar las protestas en contra de la transnacional, que cada año se registran a las afueras del evento.

“Queremos dejar bien claro el mensaje a Chevron: aunque vayan al desierto a ocultarse, ahí estaremos”, dijo Pablo Fajardo, abogado de los 30 mil afectados por la compañía, que contaminó durante 28 años la Amazonía ecuatoriana.

Según el representante de los amazónicos, debido a las dificultades para ingresar a ese territorio, tanto por vía aérea como terrestre, el grupo que se encontrará allá será solo de aproximadamente 50 personas, las mismas que se unirán al presidente del Comité Ejecutivo de la Unión de Afectados y Afectadas por las Operaciones Petroleras de Texaco (UDAPT), Humberto Piaguaje, de nacionalidad Secoya, así como Robinson Yumbo, del pueblo Cofán, quienes están en Midland para realizar una marcha en defensa de los derechos humanos.

“El objetivo es visibilizar el descontento de las víctimas por el crimen cometido por Chevron en Ecuador y en otras partes del mundo”, expresó Fajardo.

Por lo tanto no será la única manifestación en contra de la petrolera, ya que se han organizado otros plantones y marchas a nivel internacional, en solidaridad con los que se encuentran en Midland.

Hasta el momento, en la lista de ciudades confirmadas para repudiar la actuación de la petrolera estadounidense, constan: Toronto (Canadá) y 6 urbes de Europa.

Estas manifestaciones se producen luego de que el 21 de mayo pasado los afectados realizaron el Día AntiChevron, en más de 30 ciudades de diferentes países.

“No todos en Midland se benefician del petróleo”

Midland es un poblado pequeño de 111.147 habitantes y es considerado “la ciudad de la energía”, como la describió Nellwyn Barnett, de la Cámara de Comercio de Midland, al diario electrónico National Review Online, en mayo de 2013.

“Energía es nuestro pan y nuestra mantequilla, nuestra industria primaria”, dijo Barnett. El auge en la industria petrolera no es beneficioso para toda la población, pues debido al gran desplazamiento de trabajadores a la zona el precio por el alquiler de una cabaña de 37 m2 llega a costar $ 1.500 al mes.

De igual forma, la población ha tenido problemas con el agua, según aseguró Nick Carrasco, poblador de la zona. “El agua aquí en Midland sabe horrible, es algo que no se puede usar ni para cocinar”, indicó.

Chevron tiene lotes al norte y sur de esta ciudad, en uno de estos, en noviembre pasado, ocurrió una explosión en un tramo del oleoducto, incidente que no dejó heridos pero generó contaminación y susto. Pese a ello, la empresa no dio mayores explicaciones.