El fin de semana se cumplió un mes del conflicto entre Colombia y Venezuela. Hoy con la mediación de los líderes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) los mandatarios de ambas naciones tendrán su primer encuentro.

El canciller Ricardo Patiño, quien trabajó en la realización de la cita, aclaró que “el rol de Ecuador será de facilitador y de allí será el presidente Rafael Correa el que estará presente acompañándolos, mostrará nuestras experiencias, pero nada más, nosotros no vamos a mediar ni dirimir nada, son ellos los que deben hacerlo”.

“Recordemos que el presidente de la Celac, Rafael Correa (Ecuador), y el presidente de Unasur, Tabaré Vázquez (Uruguay), lo que van a hacer es facilitar y acompañar esos diálogos; los cancilleres acompañaremos porque conocemos los detalles de todo lo que ellos han propuesto. Cada paso que se dé será suyo, si se da otra reunión o hay otra, serán ellos los que decidan o envíen a sus ministros para que traten estos temas, sea que se reúnan en Bogotá o en Caracas, esto siempre es un espacio para el diálogo; somos un país de paz y conciliación entre los países”, remarcó Patiño.

Para el internacionalista Carlos Estarellas Velásquez, haber logrado que ambos mandatarios se sienten ya es un logro, pero hasta ahí llega el papel de Ecuador y Uruguay. Estos no pueden ir más allá porque los acuerdos tienen que darse entre  Venezuela y Colombia.

El analista afirmó que será una reunión difícil porque cada uno defenderá sus posturas pero podrán discutir sobre ellas aunque es complicado que lleguen a un acuerdo en una primera reunión, aseguró.

La crisis inició cuando el presidente venezolano Nicolás Maduro decidió cerró los pasos fronterizos fronteras para frenar el contrabando de combustible y productos subsidiados hacia Colombia, lo que según su punto de vista ha generado escasez en Venezuela.

Estas declaraciones fueron rechazadas por el jefe de Estado colombiano, Juan Manuel Santos, quien arremetió contra la política que aplica su homólogo.

El miércoles pasado ambos aceptaron la invitación para dialogar. “En buena hora que pudimos respirar”, detalló el canciller ecuatoriano. Al ser consultado por su punto de vista sobre el problema indicó que es normal en cada uno de los países sientan dificultades en las fronteras, que no son provocadas por los gobiernos sino por otros agentes se sienten incómodos.

El preámbulo para este diálogo fue el encuentro de las cancilleres Delcy Rodríguez (Venezuela) y María Ángela Holguín (Colombia), el 6 de septiembre pasado.

Patiño recalcó que en esa ocasión se habló de trazar una ruta pero se acordó inicialmente abrir un diálogo entre los presidentes, para que ellos den las instrucciones a sus ministros para que en las próximas reuniones se logren superar esos problemas. “Posiblemente tomará tiempo y esa voluntad para sentarse era importante porque comenzarán a escalar los problemas, haciendo incluso comentarios, lo que podría generar una situación de crisis que felizmente no ha llegado”, dijo.

Los presidentes, la tarde del lunes, dialogarán, terminarán la reunión y harán alguna declaración, pero lo fundamental es que dejarán encaminada la ruta de diálogo, ya no solo ellos como presidentes, sino con las autoridades que ellos deleguen para buscar una solución afirmó el Canciller ecuatoriano.

Santos y Maduro llegarán al diálogo con varias novedades, pues el Ejército colombiano informó de supuestas intromisiones a su frontera por aire y tierra. Sobre esto los Jefes de Estado no se han pronunciado.

El comunicado replicado por medios internacionales daba detalles de la irrupción por la frontera norte colombiana. “Los militares venezolanos traspasaron la frontera en aparente persecución de un individuo que se transportaba en una motocicleta y pretendía cruzar la frontera hacia Venezuela a través de un paso informal”.

Denunciaron además uso de armas en el territorio colombiano. “La Guardia Nacional Bolivariana efectúa disparos con armas largas y emprende la persecución en un vehículo 4x4, dentro del territorio colombiano, ingresando cerca de un kilómetro”, señaló el texto. Además informaron que la moto habría sido incendiada por parte de los miembros de ejército venezolano. (I)

Datos

Otros presidentes como los de Argentina, Brasil, que enviaron a sus cancilleres también contribuyeron a materializar la cita.

El 21 de agosto, se anunció la implantación del estado de excepción durante 60 días en Bolívar, Ureña, Junín, Libertad e Independencia; municipios del estado de Táchira, fronterizo con Colombia.

Los cierres fueron extendidos el 7 de septiembre a zonas del estado Zulia y una semana después se adoptó la misma postura a la zona del estado Apure y áreas adicionales del estado Zulia.

El 24 de agosto, el gobernador de Táchira, José Vielma Mora informó que se habían realizado 1.012 deportaciones de colombianos de Venezuela y se había capturado a 10 presuntos paramilitares. Colombia rechazó la medida.