Stephen Curry, de los Warriors de Golden State, comenzó el lunes su cita personal con las marcas dentro de la NBA y lo hizo ante los Pelicans de Nueva Orleans al convertir 13 triples, la mejor en la historia del baloncesto profesional de Estados Unidos. Eso ayudó además al triunfo de su equipo por 116-106.

Este nuevo récord se lo quitó a sí mismo. El anterior de 12 triples en 16 lanzamientos lo logró en febrero pasado, ante los Thunder, esa marca la compartió con Kobe Bryant, que la tuvo por 13 años (ver infografía).

La inspiración encestadora de Curry, actual Jugador Más Valioso (MVP) de la Liga, le quitó todo el protagonismo al alero estrella Kevin Durant, que aportó 22 puntos.

La noche del lunes, cuando todo Estados Unidos vivía un clima de elecciones, salió ovacionado por el coliseo. Los aficionados no solo que lo aplaudieron hasta el cansancio, sino que gritaron con fuerza: “Curry presidente”.

Steph se repuso en 3 días

El viernes pasado Curry falló sus 10 intentos de triples en la derrota contra Los Lakers y además fue el final de una racha de 157 partidos consecutivos marcando al menos un tiro de tres puntos.

Tres días más tarde (lunes), al reencontrarse con su gente en el Oracle Arena de Oakland, desató un vendaval de tiros al aro y fintas que terminaron por enloquecer a los defensores rivales. Al final, Curry aportó 46 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias en 35 minutos.

“Creo que tuve el toque perfecto de muñeca y después de los fallos en los últimos partidos todo volvió a la normalidad”, declaró Curry.

Steve Kerr, excelso tirador en sus años como jugador y entrenador de los Warriors, no se sintió para nada impresionado por la exhibición de su pupilo, Curry.

“Realmente fue un gran espectáculo, pero a mí no me sorprende”. Está acostumbrado a ver las barbaridades de Steph en los partidos y en sus entrenamientos.

También pensaba que su mala actuación en el último juego (viernes) le motivaría: “No es de extrañar la forma en la que Stephen se recupera de las malas noches”.

Además de los récords antes mencionados (los 13 triples y los 157 partidos seguidos anotando al menos uno), también ostenta las plusmarcas individuales en la NBA de mayor cantidad de triples encestados en una temporada y puntos en un tiempo suplementario (17).

Dueño de tiros increíbles en distancias imposibles para un mortal, es un base con pocas asistencias y un defecto que bien explica su principal virtud: su eficacia en tiros de entre 7,6 y 8,8 metros (la línea de triples en la NBA está a 7,24) es del 49%; y en lanzamientos de entre 4,5 y 7,3 metros, dentro de la zona de dos puntos, baja a 42%. Es decir: más lejos, mejor.

Un repaso a su vida

Curry nació en Akron, Ohio, la misma ciudad que LeBron James, cuando su padre Dell jugaba para los Cleveland Cavaliers.

Precisamente que su padre fuera basquetbolista profesional fue un punto clave en su crecimiento. En la actualidad hay registros de videos de un pequeño Stephen, con apenas 12 años, jugando con su papá y otros jóvenes.

Pero no todo fue el deporte en la vida de Curry. En su época de universitario en el Davidson College, protagonizó un programa de bromas y música de rap que se llamaba ‘The Davidson Show’. La producción la coprotagonizó con otros amigos y compañeros universitarios.

Una de sus últimas intervenciones en el programa que se transmitía por YouTube fue en 2009. Justo coincidió con el momento en el que se declaró elegible para el draft de la NBA. Curry entonces envió un email a todo el colegio, amigos y familiares para que vieran el video. Tuvo cerca de 500.000 visitas en esos días, ahora pasa el millón.

Kerr, el guía de las gestas

Steve Kerr es el hilo conductor de una historia de grandes gestas en la NBA, la última, los 13 triples de Stephen Curry, el lunes pasado.

Kerr fue compañero de Michael Jordan y jugó con aquel maravilloso Bulls de 1996 que estableció una marca de 72 victorias seguidas que se creía imbatible.

Desde 2014 dirige a los Warriors y a Curry. Con ellos volvió a ganar un anillo, en 2015, y batió la marca de su exequipo, con 73 victorias de manera seguida, la pasada campaña.

Ahora asiste a la última gesta de su base de 1,90 metros y 86 kilos al que apodan Baby Faced Assassin (El asesino con cara de niño).

Kerr enfatiza la confianza que tiene Curry. “Michael (Jordan) ha sido el ser humano con la mayor autoconfianza que he conocido, pero la autoconfianza de Steph solo la he visto en Jordan. No lanzas desde 10 metros si no estás muy seguro de ti mismo; son muy parecidos”. (I)