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La joven desea entrar al plan de alto rendimiento
Mylena, una guerrera de las minirraquetas
Don Alberto Plaza Daza pensó que a su nieta Mylena Plaza Rivadeneira le sentaría muy bien el ping pong. No se equivocó, lo que comenzó con un curso vacacional promovido por la Asociación de Tenis de Mesa del Guayas, hace 6 años, fue el inicio de una carrera boyante que tiene como nuevo logro las medallas de oro en individual, equipos y dobles damas de los Juegos Sudamericanos Escolares ‘Asunción 2015’.
Con 13 años de edad, Mylena se proyecta como una de las mejores exponentes del país y es posible que en 2016 ingrese al Plan de Alto Rendimiento que maneja el Ministerio del Deporte.
“Al menos esa es la idea, creemos que ha hecho méritos. Todo dependerá de la evaluación que haga el Ministerio, que con justa razón pide resultados para otorgar este beneficio”, menciona Marcia Bonilla, presidenta de la Federación Ecuatoriana de Tenis de Mesa.
Y es que la ‘Ratoncita’ o ‘Cachetes’, como le dicen sus allegados, acaba de cerrar su mejor temporada. A las 3 preseas sudamericanas cosechadas en Paraguay se suman las 4 medallas de oro que alzó durante los Juegos Nacionales de Menores que se celebraron en Guayaquil el pasado noviembre.
En su ciudad natal, la chiquilla conquistó el primer lugar en individual, parejas femeninas, parejas mixtas y por equipos.
Washington Zambrano, jefe técnico de la sala de microtenis de la Federación Deportiva del Guayas (Fedeguayas) y entrenador de Mylena, asevera que el juego de la cultora ha subido su nivel de tal manera que, pese a no ser favorita, para el título surcontinental superó a las mejores de la región, sobre todo a la chilena Valentina Ríos, quien la dejó fuera del Campeonato Sudamericano que se realizó en Lima el pasado septiembre.
A Ríos la doblegó 4-2 en las semifinales luego de ir perdiendo 2-0, con lo que se tomó la revancha de lo sucedido en Perú. “A Lima no viajé porque tenía que atender otros asuntos. En Asunción sí pude acompañarla y corregir sus errores sobre la marcha”, cita el instructor.
Sobre las virtudes de la porteña, don ‘Wacho’ responde que es persistente y guerrera a morir. Pierda o gane siempre se exprime hasta el último gramo de esfuerzo. Lo malo en ella, prosigue, es que es muy confiada y por ello ha sufrido algunas decepciones.
“La entreno desde que tenía 7 años. Nos conocemos tanto que hemos desarrollado una comunicación gestual y telepática única. Solo con verle el rostro sé cuando está nerviosa, cuando necesita algo o cuando está a punto de sacar su mejor juego”, comenta.
Eso de que es una luchadora a ultranza lo confirma Silvana Rivadeneira, madre de la raquetista, quien también la califica de responsable y dedicada en todo lo que hace. No en vano es una de las más destacadas en el noveno de básica del Liceo Interoceánico Los Delfines.
Agrega que además de extrovertida es algo gruñona, sin que ello le quite brillo a su carismática personalidad. Sueña con estudiar medicina y ser campeona olímpica. (I)