LeBron James, que logró el sueño de su vida al darle a su natal Cleveland su primer título de deportes en 52 años, dice sentirse motivado y quiere eclipsar a Michael Jordan como el mejor jugador en la historia del baloncesto estadounidense. James, nativo de la cercana Akron, comenzará hoy su 14ª campaña de la NBA, cuando los Cavaliers reciban sus anillos de campeones de la temporada pasada antes de su debut contra Nueva York Knicks, en la apertura de campaña 2016-17.

A sus 31 años, el cuatro veces Jugador Más Valioso (MVP), se echó encima a los Cleveland en junio pasado para conseguir la mayor remontada en la historia de las finales de la NBA. Perdían 3-1 contra Golden State Warriors la serie al mejor de siete partidos, cuando James cambió la historia.

En esa final, LeBron promedió 29.7 puntos, 11.3 rebotes, 8.9 asistencias, 2.3 tapones y 2.6 robos por partido, para liderar cada uno de esos departamentos en la serie, hazaña sin precedentes que le valió unánimes honores de MVP en finales del torneo.   

James regresó como un héroe a Cleveland después de haber ganado dos títulos en cuatro temporadas con el Miami Heat, a donde se fue tras jugar sus primeras siete temporadas para los Cavaliers. Ahora admite que su inspiración viene de tratar de superar a la ex estrella de los Chicago Bulls y ser visto como el mejor jugador en la historia de la NBA, un desafío titánico. “Mi motivación es este fantasma que estoy persiguiendo. El fantasma que jugó en Chicago”, expresó James, citado por la revista Sports Illustrated.

Jordan, hoy de 53 años, ganó en su época seis títulos en seis viajes a las finales de la década de 1990 con los Chicago Bulls, y el MVP en cada una de esas finales. Fue el MVP de temporada regular en cinco ocasiones, 14 seleccionado al Juego de Estrellas y en 10 campañas campeón anotador de la liga.

Jordan, ahora rico propietario de los Charlotte Hornets, también es el líder anotador de todos los tiempos en los playoffs, y ocupa el cuarto lugar en la lista de los mejores anotadores de la temporada regular de la NBA.

Y todo eso con una pausa de casi dos temporadas, en que se retiró para jugar béisbol profesional en la década de 1990.      

Un sueño pendiente                      

James ha coleccionado tres títulos a la misma edad que Jordan había ganado sus tres primeros anillos de campeón, pero lo ha logrado en siete finales, seis de ellas de forma consecutiva. Fue merecedor del MVP de las temporadas de 2012, 2013 y 2016 y ha sido seleccionado 12 veces All-Star, pero ganó su única corona de anotación en 2008. Ambos tienen similitudes en sus clavadas fenomenales y estilo acrobático.

En sus cinco temporadas después de los 31 años, Michael Jordan ganó tres títulos con Chicago e hizo una reaparición, tras dos años de retiro, con los Wizards de Washington a partir de 2001-2003, antes de retirarse para siempre a los 40 años.

James tiene aún nueve años por delante para imitar a Jordan. “Esa es mi inspiración personal. Eso es lo que me motiva”, dijo James ayer a la cadena ESPN.

Para James, eso significa que hoy comienza una búsqueda de ocho meses para volver a las Finales de la NBA y defender el título, algo que ningún equipo de Cleveland ha logrado desde los Browns de la NFL de 1955. “No va a ser fácil, y no debe ser fácil”, dijo James. “En mis 2 años aquí, nunca ha sido fácil, y en mi carrera de 13 años, hasta ahora nada ha sido fácil”. (I)  

Cavaliers y Warriors, los   favoritos

La temporada 2016-17 de la NBA comienza hoy con los campeones Cleveland Cavaliers del astro LeBron James, y los Golden State Warriors de Stephen Curry y Kevin Durant, con cartel de grandes favoritos para repetir la final  por segundo año consecutivo.

Durant, cuatro veces campeón anotador del torneo, llegó a los Warriors con un contrato de dos años por un valor de 54,3 millones de dólares.

Nadie duda de que los Warriors son el equipo a vencer en la Conferencia Oeste con la adición de Durant a un róster que de por sí era el más compacto de esa liga, pero deben demostrar que psicológicamente se han recuperado del impacto que significó perder ante los Cleveland Cavaliers, una final que iban ganando 3-1 en la pasada campaña.

Para cualquier equipo que haya dominado la temporada regular de punta a cabo con 73 victorias y solo 9 derrotas, y luego caiga a las puertas del título, ese puede ser un golpe devastador.

Es por ello que ahora, en vez del récord de 74 victorias en la nueva campaña, se mentalizan en las 16 que deben conseguir para recuperar una corona que cedieron a los Cavaliers.

Los Warriors deben plantar en el terreno un equipo formado por los bases Stephen Curry y Klay Thompson, con Durant y Raymond Green en las alas y Zaza Pachulia en el pívot.                   

En el Oeste, solo los incombustibles San Antonio Spurs parecen capaces de oponerse a los Warriors, pero de seguro resentirán la ausencia de su retirado astro Tim Duncan, reemplazado por el español Pau Gasol. (I)