Los enanos que compiten en los Paralímpicos de Río 2016 están ocupando el gran escenario que dicen merecer. Quienes participan en natación, esta semana citaron el éxito de Tyrion Lannister, el enano antihéroe de la serie de TV Game of Thrones, como un importante logro para revertir siglos de mofas e ignorancia.      

Y en Río de Janeiro -desde la piscina hasta las pistas de atletismo- llevan la lucha por el respeto a nuevos niveles. “La gente empieza a darse cuenta de que somos mucho más capaces, que somos más grandes de lo que la mayoría de la gente ve con sus ojos debido a nuestra altura”, dijo la nadadora estadounidense Reilly Boyt, de 20 años.

Boyt, que tiene un arete en la nariz y luce pequeños pendientes con forma de estrella en sus orejas, recuerda una cantidad mucho menor de competidores enanos en los Paralímpicos de Londres 2012 y a “casi ninguno” en los campeonatos mundiales de 2013.

En los partideros, el diminuto tamaño de las mujeres es sorprendente. Una vez que se zambullen, no obstante, el efecto del agua con las brazadas y patadas hace que parezcan diferentes: mucho más grandes. “Como gigantes”, dice Boyt con satisfacción.

El Comité Paralímpico Internacional (CPI) no dio cifras sobre la cantidad de enanos que compiten en Río, pero el portavoz Craig Spence dijo que juego a juego ven un número creciente”. Pueden competir en seis deportes Paralímpicos: atletismo, ecuestre, levantamiento de pesas, natación, tenis de mesa y tenis en silla de ruedas.

Sophia Herzog, de 19 años, otra nadadora estadounidense, dijo que ha sido emocionante competir “con un montón de enanos”, incluyendo a la británica Eleanor Simmonds, que ganó la medalla dorada en los 200 m combinados, sumando una nueva presea a su botín de 4 oros logrados en los Juegos de Pekín y Londres.  

“Esperemos que sea inspirador para muchos otros como nosotros”, dijo Herzog. “Podemos tener educación universitaria o una maestría. Competimos en los Paralímpicos. Obtenemos récords mundiales. Podemos conseguir trabajos normales, ser un director ejecutivo; no somos diferentes”.  

La gran popularidad de la serie Game of Thrones y su personaje Lannister, encarnado por el premiado Peter Dinklage, que rompe con los clichés, ha producido un cambio. “Fantástico”, dijo Boyt. “Es maravilloso”, indicó por su parte la nadadora enana española Judit Rolo Marichal, “porque el tipo que hace el personaje es increíble. No tiene nada que ver con que él sea pequeño”.                   

Pero aún queda un largo camino por recorrer. Rolo, de 25 años y quien trabaja como veterinaria en España, dice que los enanos son relativamente ignorados dentro del mundo paralímpico, donde la atención se centra fundamentalmente en los amputados y en aquellos confinados a sillas de ruedas debido a accidentes o enfermedades.     

Y en toda la sociedad, abundan la falta de empatía y los crueles prejuicios. En los supermercados y sitios de trabajo, nada hacen para ayudar a que estas personas alcancen las estanterías, dijo Rolo, quien recuerda desagradables incidentes en los que sus maestros de escuela la excluían de actividades, así como docenas de miradas incómodas en las calles.

“Muchas veces los niños preguntan a sus padres: ‘¿por qué es ella tan pequeña?’, y el padre responde: ‘está enferma, no la mires’”, dice la nadadora española, quien tiene tatuada una mariposa en su hombro izquierdo. (I)