La Federación Mexicana de Natación reconoció este viernes que hizo “ajustes” para que los nadadores de su país clasificaran al Mundial de Kazán (Rusia), pero negó que se tratara de un engaño y aseguró que la Federación Internacional de Natación (FINA) estaba enterada de estos hechos.

La declaración de la federación mexicana llega un día después de que el portal www.swimswam.com publicara que, según una fuente no identificada, ese organismo habría alterado marcas de la mayoría de sus nadadores para que pudieran clasificar al Mundial, que arrancó el 24 de julio en la ciudad rusa de Kazán.

Por ejemplo, las nadadoras mexicanas: Sharo Rodríguez (foto) y Laura Arroyo fueron inscritas en la prueba de los 100 metros mariposa con tiempos de 59.12 y 59.14, respectivamente, y la marca A de la FINA es de 59.16. En las eliminatorias nadaron en 1:02.97 y 1:03.18.

“Los ajustes realizados fueron con el único propósito de que el sistema automático de inscripción admitiera a nuestros atletas”, dijo este viernes la Federación Mexicana de Natación en un comunicado oficial que entregó a los medios locales e internacionales.

El organismo quiso recalcar que no actuó “con dolo o mala fe” y que la Federación Internacional de Natación (FINA) tuvo conocimiento de los hechos desde el primer día que se realizaron.

“La propia FINA estuvo al tanto en todo momento sobre la inscripción de los atletas mexicanos en este evento, misma que avaló para que ellos pudieran asistir a mencionada justa”, afirmó.

La federación mexicana explicó que su objetivo era “incrementar la motivación y el fogueo internacional” de sus nadadores, ya que en este Mundial fueron inscritos aquellos atletas que no pudieron asistir a los Juegos Mundiales Universitarios de Corea, así como uno, Daniel Ramírez (foto), que quedó fuera de los Juegos Panamericanos de Toronto.

“Las inscripciones se dieron en un momento especialmente complicado para nuestra especialidad, como fue la cancelación de los Campeonatos Mundiales FINA de 2017 que iban a tener como sede la ciudad de Guadalajara, lo que ha generado una desmotivación masiva en la comunidad acuática de México”.

El pasado febrero, el Gobierno de México anunció su renuncia a organizar los Campeonatos Mundiales de Natación que debía realizar en 2017 en Guadalajara (oeste) como parte de sus drásticos recortes de gasto público.

La federación mexicana también aseguró que la clasificación de sus nadadores no buscó en ningún momento “afectar a algún atleta de ningún país con la inscripción a los Mundiales de Kazán”.

“Hacemos constar que no hubo ninguna afectación en el desarrollo del certamen debido a la asistencia del equipo mexicano al campeonato mundial”, sostuvo el organismo. (I)