Jeyson Minda se defendía de los golpes de un niño que lo molestaba. Lo venció sin problemas, pero no contaba con que el hermano del malherido apareciera en escena. KO también. El ‘Verdugo’, apelativo con el que lo conocen en el mundo del boxeo, no pensaba que aquella pelea callejera representaría su incursión en el boxeo.

Un profesor que pasaba por el lugar, Emilio Oña, observó la destreza con la que Minda se defendía de sus acosadores y vio en él, que tenía unos 12 años, un potencial para el deporte. Así, lo convenció para entrenarlo y hoy Minda será protagonista de un combate por el título sudamericano de las 168 libras, contra Jinner Guerrero.

En la última cartelera boxística del año, el ‘Verdugo’ pretende mantener su invicto. Lleva 13 peleas, de las cuales ganó 12 y empató la otra, por la que quiere cerrar el año con otro cinturón y una nueva victoria.

Minda se define como un boxeador al que no le gusta que le peguen, así suene ilógico en este deporte. “Me muevo mucho para evitar que me ataquen. Mi apelativo de ‘Verdugo’ viene porque soy fajador y cuando debo eliminar a un rival, lo hago”, contó el riosense.

El oriundo de Quevedo actúa desde hace 2 años en el profesionalismo, luego de una carrera a nivel amateur. Ya hace un año probó sus condiciones a un nivel superior y consiguió el título sudamericano en las 160 libras, tras vencer al peruano Miguel Bustinza, por decisión unánime de los jueces.

Después defendió con éxito ese cinturón contra el argentino Miguel Ángel Cobas y lo venció por KO en septiembre pasado, por lo que continúa reinando en esa categoría.

Ahora que ascendió a otra más fuerte, Minda se preparó intensamente en la parte física y admitió sentir algo de presión para disputar el título. La intención es poder ascender en el ranking y tener la oportunidad de asistir a carteleras internacionales; mantenerse invicto y ganar el título le acercará más a ese ideal.

El alias de ‘Verdugo’ fue por el parecido que le encontró Oña con el boxeador estadounidense Bernard Hopkins, tanto física como técnicamente. Hopkins enfrentó a uno de los peleadores que Minda más admira: Segundo Mercado. Ambos disputaron el título mundial en los noventa, cinturón que se quedó con el norteamericano.

También tiene como referente a Ramiro Clay Bolaños, otro de los ecuatorianos que disputó el título mundial en los setenta. A nivel internacional, lo que hizo Floyd Mayweather le sirve como motivación, porque lo considera un showman, que ha sabido manejarse bien en cada pelea.

Guerrero es un ecuatoriano radicado en Estados Unidos y será la primera vez que Minda lo enfrente. “Lo he visto y sé que es un boxeador muy fuerte; será de los más fuertes a los que haya enfrentado, pero me he preparado bien para derrotarlo”.

‘Memín’ pelea por afirmarse

Julio Cortez, más conocido como ‘Memín’, es el actual campeón sudamericano en la categoría 126 libras y luego de defender con éxito su título el mes pasado contra el venezolano José Luis Graterol, esta vez no lo hará. Su intención es mantenerse y subir en el escalafón.

“Quiero terminar bien el año con esta pelea y alargar mi racha. Se ha hecho un buen trabajo y la intención, al igual que Jeyson, es poder disputar peleas el próximo año en el exterior”.

Cortez se enfrentará a Jonathan Valarezo y pelear contra él tiene una complicación para ‘Memín’: es zurdo. “Siempre se me ha hecho difícil pelear contra boxeadores zurdos. A pesar de que he ganado, es más complicado para mí”.

José Angulo, uno de los más jóvenes prospectos, con 20 años, también estará en la cartelera. El guayaquileño, apodado el ‘Diablo’, se enfrentará a Jorge Arce en una pelea a cuatro asaltos. El púgil alternó sus entrenamientos con clases privadas de boxeo que imparte en su ciudad. (I)