Si bien no ingresó en el podio latinoamericano en los recientes Juegos Olímpicos de Río 2016, Argentina logró su mejor participación desde Londres 1948 con tres preseas de oro, una de plata y un meritorio cuarto lugar regional detrás de Brasil, Cuba y Colombia.   

En el medallero general, el país austral se ubicó en el puesto 27, muy lejos del ‘primer mundo’ olímpico, pero al mismo tiempo se reafirmó como una verdadera potencia en deportes por equipos.      

En estos Juegos las medallas de oro fueron para la judoca Paula Pareto, en la categoría hasta 48 kilos;  Santiago Lange y Cecilia Carranza en Yachting (Nacra 17) y la selección masculina de hockey sobre césped. La plata se la llevó el tenista Juan Martín del Potro, quien volvió después de casi dos años a las canchas tras superar una lesión en su muñeca y llegó hasta la final luego de  derrotar al serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, y al super-campeón español Rafael Nadal. Solo el escocés Andy Murray detuvo su marcha en una reñida final que se definió en cuatro sets.   

Las mejores participaciones olímpicas de Argentina siguen siendo Ámsterdam 1928 y Londres 1948 cuando logró tres medallas de oro, tres de plata y una de bronce. Pero Río 2016 significó la ratificación de una costumbre ganadora de selecciones albicelestes olímpicas.      

Esta vez fue el turno del hockey masculino sobre césped, cuya selección apodada ‘Los Leones’ obtuvo un oro inédito tras deambular en los últimos 15 años tras la sombra del exitoso equipo femenino, ‘Las Leonas’, actual campeón del mundo y que solo obtuvo un diploma olímpico en Río.

Desde Sídney 2000, Argentina ganó nueve medallas en deportes por equipos, algo solo igualado por Holanda. Pero hay una diferencia entre ambos: el país europeo cosechó todas sus preseas en una sola disciplina: el hockey sobre césped. A su vez, la nación austral lo logró en esa misma especialidad y en el básquet y el fútbol.   

El detalle es el siguiente: cinco preseas en hockey (una de oro en la rama masculina y dos de plata y dos de bronce en la femenina); dos en básquet masculino (una de oro en Atenas 2004 y otra de bronce) y dos en fútbol masculino (dos de oro, en Atenas 2004 y Pekín 2008 con Lionel Messi).   

Pero hay un detalle más: en la historia del olimpismo ningún país obtuvo medallas doradas en las ramas masculinas de fútbol, básquet y hockey. Solo Argentina.

Se trata de una gran noticia para el olimpismo argentino y para el deporte en general. Y más teniendo en cuenta que en Río 2016 la selección masculina de voleibol finalizó en el quinto lugar, tras ganar su grupo y perdiendo en cuartos de final ante Brasil, que luego conquistaría el oro olímpico.

En básquet, la llamada ‘generación dorada’ liderada  por Manu Ginobili se despidió también en cuartos ante el ‘Dream Team’ estadounidense, que luego fue campeón del torneo. Al final de ese partido, los basquetbolistas norteamericanos le rindieron un emotivo homenaje a Ginobili que a los 39 años le dijo adiós a la selección.

También el rugby en su categoría seven tuvo una meritoria actuación finalizando en el sexto lugar tras caer en cuartos de final en tiempo suplementario ante Gran Bretaña.

El país austral también clasificó a Río 2016 a sus selecciones de handball (femenina y masculina) y de voleibol femenino, en este caso por primera vez en su historia.

Ninguna de las tres logró avanzar a las finales, pero no decepcionaron.

Los que sí desilusionaron fueron los futbolistas. En una de las peores actuaciones olímpicas, la selección no logró pasar la primera ronda. Con un equipo diezmado por la ausencia de sus figuras sub 23 que no tuvieron autorización de sus clubes para viajar, el equipo ‘albiceleste’ cayó 0 a 2 ante Portugal en el debut, le ganó 2 a 1 a Argelia y no pudo doblegar a Honduras, que logró un valioso empate 1-1 y avanzó como segundo en la llave detrás de los lusos.

Pero los deportes por equipos argentinos siempre tienen un as en la manga. Tras el fracaso futbolístico y con ‘Las Leonas’ en bajo nivel, apareció en el horizonte el seleccionado de hockey masculino que dio la sorpresa y se llevó una medalla de oro que no estaba en los planes de los más optimistas.  

En las disciplinas individuales, Argentina también tuvo motivos para sonreír: más allá de la medalla dorada de la judoca Pareto (o de la dupla Lange-Carranza en vela), los argentinos llegaron a las finales de salto con garrocha (Germán Chiaraviglio) y jabalina (Brian Toledo). En total, el país cosechó 11 diplomas olímpicos.

“Todos sentimos que la misión está cumplida. Las tres medallas de oro se dieron donde trabajamos mucho. Hicimos unos Juegos como hacía muchas décadas que no hacíamos”, resumió el presidente del Comité Olímpico Argentino, Gerardo Werthein. (I)