Ola de atentados en Afganistán dejan al menos 46 muertos

Tres ataques suicidas perpetrados este martes en Zaranj, capital de la provincia afgana de Nimroz (suroeste), fronteriza con Irán, causaron la muerte de al menos 36 personas.

Las autoridades indicaron que entre las víctimas mortales constan 21 civiles y 15 miembros de las fuerzas de seguridad. También hay 66 heridos.

La Policía indicó que tres kamikazes hicieron estallar los explosivos que llevaban en tres lugares diferentes de la ciudad, uno de ellos frente a un hospital.

Estas tres personas formaban parte de un grupo compuesto por 11 atacantes, parcialmente desbaratado por las fuerzas del orden. Dos de ellos fueron abatidos la noche de ayer y otros tres detenidos hoy.

Más tarde se registró la explosión de un coche bomba en un concurrido mercado del distrito de Dasht-e-Archila, en la provincia de Kunduz, en el norte del país.

Según las fuentes policiales, en este último ataque fallecieron al menos diez civiles, mientras otros 28 resultaron lesionados.

El atentado se produjo cuando decenas de personas se habían congregado para realizar compras con motivo del Eid-ul-Fitr, una festividad que esta semana marcará el fin del mes sagrado islámico de ayuno o Ramadán.

Los civiles se han consolidado como un colectivo muy vulnerable en la guerra afgana, que ya dura más de una década desde la invasión de EE.UU. y caída del régimen integrista talibán a finales de 2001.

Según la ONU, en 2011 perdieron la vida 3.021 civiles a causa del conflicto, la mayor parte en acciones atribuibles a la insurgencia.

Esa cifra es la más alta desde que el organismo multilateral comenzó a registrar este tipo de datos hace cinco años.