Estados Unidos.-

La Cámara de Representantes de Estados Unidos, de mayoría republicana, inició ayer al mediodía el debate sobre el preacuerdo alcanzado ayer en la madrugada en el Senado para contrarrestar los efectos del llamado “precipicio fiscal”.

El preacuerdo, elaborado en el Senado y aprobado con 89 votos a favor y 8 en contra, extiende las exenciones impositivas que datan de una década y benefician a la mayoría de los contribuyentes, pero aumenta los impuestos para individuos con altos ingresos económicos.

El texto prevé un aumento de los impuestos para los más ricos (la tasa de imposición pasará de 35 a 39,6% para los hogares con ingresos superiores a 450.000 dólares anuales), pero deja interrogantes por la postergación de dos meses del plazo para poner en vigor recortes del gasto público federal por unos 109.000 millones de dólares, en particular en el área de defensa.

“Si bien ni los demócratas ni los republicanos obtuvieron todo lo que querían, este acuerdo es lo que hay que hacer por el bien de nuestro país y la Cámara debe aprobarlo sin demora”, dijo el presidente Barack Obama en un comunicado.

“Hay más trabajo aún por hacer para reducir nuestro déficit, y estoy dispuesto a hacerlo”, dijo Obama al asegurar que los sacrificios para reducir el endeudamiento del país deberían ser “compartidos”.

La sesión de la Cámara baja se inició  sin que se sepa todavía si su presidente, el republicano John Boehner, la someterá a votación. El funcionario no ha expresado respaldo ni oposición al acuerdo.

Mañana se iniciará un nuevo período legislativo y decenas de miembros de la Cámara baja que perdieron la elección en noviembre podrían ser  un bloque decisivo si se termina votando el acuerdo aprobado en la madrugada por el Senado.

El jefe de la minoría republicana en el Senado, Mitchell McConnell, dijo que el arreglo, si bien no satisface la demanda básica de su partido contraria a todo tipo de aumento de los impuestos, al menos protege de tal incremento a la mayoría de las familias.

El representante Tom Cole, de Oklahoma, y miembro del equipo dirigente republicano en la Cámara baja, sí manifestó su apoyo al acuerdo durante una entrevista en la mañana con la cadena MSNBC de televisión por cable.

En la cámara de 435 miembros hay actualmente 241 republicanos y habrá menos cuando se inaugure el 113 período legislativo mañana.

Fuentes políticas indican que Boehner podría contar con un contingente fiel de cerca de 100 republicanos para la aprobación en la Cámara de Representantes del acuerdo del Senado con pocas modificaciones.

El resto de los votos deberá venir de 194 demócratas, muchos de quienes están descontentos con la propuesta, porque contempla reducciones de los gastos del gobierno en programas de asistencia social, educación y salud.

Si la Cámara de Representantes aprueba el acuerdo del Senado, con pocas enmiendas, hubo una conferencia de conciliación y las decisiones fueron retroactivas a medianoche del 31 de diciembre al 1 de enero, de forma tal que las exenciones impositivas y los cortes de gastos que, técnicamente, entraron ya en vigencia nunca se notarán.