Reprimen protestas por violación múltiple en India

Choques violentos entre policía y manifestantes ciudadanos indios ocurrieron ayer cerca del Palacio Presidencial en Nueva Delhi, luego de 5 días de protestas pidiendo castigo contra 6 sujetos que el pasado domingo violaron a una joven de 23 años en un ómnibus.

Fuerzas policiales y paramilitares usaron bastones y gases lacrimógenos contra los manifestantes, que respondían lanzando piedras y botellas de agua.
Ninguna fuente precisa el número de víctimas, pero todas las calculan en varias decenas, incluyendo agentes del orden.

Los manifestantes demandaron castigo ejemplarizante para los violadores de la chica, cuya vida estuvo en riesgo debido a la paliza que también le propinaron. Su estado de salud sigue siendo crítico, pero sus signos vitales son estables con tendencia a la mejoría.

Los inflamados discursos de los protestantes claman por la pena capital o la castración para los sujetos, todos apresados ya. En la India, la condena máxima por ese delito es cadena perpetua.

Los manifestantes piden al gobierno mayor presencia policial en las calles y la adopción de otras medidas que garanticen la seguridad de la ciudadanía.

Según estadísticas oficiales, los casos de violación aumentaron en el país casi 875% en los últimos 40 años, al pasar de 2.487 en 1971 a 24.206 en 2011.

En Delhi, el número de mujeres abusadas sexualmente fue de 572 el año pasado y 612 en lo que va de este. Pero organizaciones femeninas dicen que esas cifras son mayores, pues miles de mujeres no denuncian el hecho por vergüenza o por temor a represalias de sus victimarios, a lo que se unen la corrupción y la desidia de los cuerpos policiales.

De acuerdo con la Oficina Nacional de Registro de Crímenes, cada 22 minutos una mujer india sufre ese vejamen físico y moral, pero solo en uno de cada cuatro casos el violador es condenado.