Perú comenzó 2019 con un varapalo a su lucha anticorrupción por la polémica decisión del fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, de destituir a dos fiscales que investigan el caso Odebrecht en plena Nochevieja.

El anuncio fue hecho a cuatro horas del cambio de año y publicado hoy en el diario oficial El Peruano. Los fiscales cesados son Rafael Vela, coordinador del equipo especial que investiga el caso Odebrecht, y José Domingo Pérez, el fiscal estrella del grupo, popular por llevar a prisión preventiva a la líder opositora Keiko Fujimori y arrinconar al expresidente Alan García. 

Las razones de Chávarry para desprenderse de los dos fiscales es por supuestamente vulnerar los principios de jerarquía de la Fiscalía y de reserva de la investigación. Pero los ceses llegan a días de que el equipo   firmase el acuerdo de colaboración eficaz con Odebrecht que iba a dar un espaldarazo a las investigaciones.

El hecho tomó por sorpresa al presidente de Perú, Martín Vizcarra, de viaje en Brasil para asistir a la toma de mando del presidente Jair Bolsonaro.

Vizcarra retornó a Lima y ha solicitado la dimisión de Chávarry por sus nexos con la red de tráfico de influencias, favores y prevaricación.

“La lucha frontal contra la corrupción y la impunidad es una política prioritaria de Gobierno, una necesidad impostergable y una causa ciudadana”, indicó en  Twitter al regreso desde Brasil.

A pesar de este suceso, varios mandatarios de la región asistieron a la ceremonia de posesión que se realizó en el hemiciclo del Senado, entre ellos, los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Chile, Sebastián Piñera; Honduras, Juan Orlando Hernández; Paraguay, Mario Abdo Benítez; Perú, Martín Vizcarra; y Uruguay, Tabaré Vázquez. Asimismo, estuvieron los primeros ministros de Israel, Benjamín Netanyahu; Hungría, Víktor Orbán; y Marruecos, Saadedine Othmani; presidentes de Portugal, Marcelo Rebelo de Souza; y de Cabo Verde, Jorge Carlos Fonseca; y otras autoridades. (I) et