Palestinos rezan vigilados

Los pasajes de la Biblia cuenta que José, hijo de Jacob y de Raquel, fue vendido por sus hermanos celosos y conducido a Egipto, donde se convirtió en esclavo del faraón. A su pedido, José fue enterrado en tierra de Israel y su tumba se transformó en un lugar de peregrinaje. Algunos arqueólogos dudan que la construcción albergue la tumba original de José y consideran más probable que se trate del sepulcro de un jeque medieval, lo que no impide que sea lugar sagrado de peregrinación para los judíos.

El templo descansa a los pies del Monte Gerizim de Nablús y cerca del campo de refugiados de Balata. El lugar fue restaurado tras la ocupación israelí de 1967 pero, tras los acuerdos de Oslo, la zona en la que se encuentra quedó bajo el control administrativo de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), protegida por soldados israelíes.

Las tropas lo abandonaron durante la Segunda Intifada o “Intifada de Al Aqsa”, en 2000, y desde 2007 se organizaban convoyes desde Israel para que los judíos pudieran rezar en el lugar.

Hace ya 15 años, el 8 de octubre de 2000, el templo fue incendiado y el entonces presidente de la ANP, Yasser Arafat, repudió el hecho e inmediatamente mandó a reconstruirlo. Ayer durante el convocado ‘Viernes de la ira’, nuevamente se prendió fuego en el área.

Un grupo de jóvenes palestinos se concentró ante el complejo y lanzó cócteles molotov. La policía palestina y los bomberos llegaron al lugar poco después, extinguieron las llamas y dispersaron a la multitud. Según el diario Haaretz, se realizaron varios disparos al aire, aunque no se registraron heridos.

El ejército israelí denunció lo ocurrido como una violación de la libertad de culto e insistió que llevará a los responsables ante la justicia. Mientras que del lado palestino, el presidente Mahmud Abas, intentó rebajar tensiones y calificó poco después de “acto irresponsable” y “gesto deplorable” este incendio.  Este incendio “ofende nuestra cultura y nuestra religión”, dijo Abas, quien prometió que los daños serán reparados.

Según la tradición, José también es venerado por los cristianos.

También la Organización de las Naciones Unidas (ONU) condenó “firmemente” el ataque contra el santuario y avisó de las “catastróficas” consecuencias de convertir el conflicto palestino-israelí en un conflicto religioso. “Este incidente representa un episodio especialmente preocupante dada su dimensión religiosa”, recalcó ante el Consejo de Seguridad el subsecretario general de la ONU para Asuntos Políticos, Tayé-Brook Zerihoun.

Este ‘Viernes de la ira’ fue convocado por activistas palestinos, aupados por el grupo radical Hamás, en represalia a lo que llaman el hostigamiento excesivo del ejército israelí en la zona ocupada de Jerusalén. Los disturbios dejaron ayer 4 palestinos muertos, uno de ellos abatido en Hebrón tras herir a un soldado israelí con un cuchillo y otros 3 fallecidos en los enfrentamientos con el ejército judío en Gaza y Cisjordania.

Además de lo sucedido en Nablús, las manifestaciones del ‘viernes de la ira’ en Cisjordania provocaron fuertes enfrentamientos en Gaza, Belén y Ramala.

En un video producido por el portal Vice News se muestra cómo los palestinos que pasan por las zonas sagradas para los judíos son revisados de forma permanente, en busca de supuestos cuchillos. Los musulmanes deben realizar sus plegarias bajo la mirada del ejército. “Nos tratan como terroristas”, dice un joven entrevistado en el video, quien justifica frente a las cámaras lo que ocurrió el viernes.

Israel y los Territorios Ocupados de Palestina viven una oleada de violencia desde principios de mes en los que han muerto 38 palestinos, 14 de ellos abatidos en ataques a israelíes, la mayoría con arma blanca, y 7 israelíes, además de causar decenas de heridos en ambos bandos. Ese balance engrosó a lo largo del ‘viernes de la ira’ con la muerte de un hombre que fue abatido cerca de Kiriat Arba, en las afueras de Hebrón, tras herir a un soldado con un cuchillo.

“Hay más y más gente que habla de una tercera intifada y mientras más lo hacen, más cobra vida porque la gente actúa como tal violenta, del lado palestino e israelí”, explica Jeremy Pressman, un profesor de ciencias políticas de la Universidad de Connecticut, entrevistado por el portal de noticias Vox.

Para él, el líder israelí Benjamín Netanyahu no está interesado en salir del ‘status quo’ y ceder los territorios ocupados. (I)