Nuevo atentado en Siria pone a tambalear proceso de paz

Cincuenta personas murieron ayer en una triple explosión cerca de una mezquita chiita, ubicada al sur de Damasco, y que dejó 110 heridos. El ataque reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) coincide con negociaciones de paz sobre Siria en Ginebra. Horas antes, la delegación del régimen sirio acusó a la oposición de falta de seriedad en las negociaciones en Ginebra para intentar resolver el conflicto en Siria.

Bashar al Jaafari, embajador sirio ante la ONU, quien encabeza la delegación del régimen, afirmó asimismo que Damasco quiere que se termine “el baño de sangre” en Siria. La oposición, que vaciló durante 4 días antes de aceptar participar en estas negociaciones, había amenazado el sábado con marcharse de Suiza si el régimen seguía cometiendo “crímenes” contra la población siria.

Pero el proceso de paz se tambalea incluso antes de haber comenzado. La oposición se niega por el momento a negociar con el Gobierno sirio y exige que se levanten los asedios en Siria y se detengan los ataques contra los civiles. El conflicto sirio ha dejado más de 260.000 muertos desde 2011 y empujado al exilio a millones de personas. (I)