La revancha de la Teología de la Liberación
La teología de la liberación, surgida en América Latina en el marco de las luchas por mayor justicia social y arraigada en los movimientos sociales, parece estar amparada bajo el manto del jesuita argentino Jorge Bergoglio, el papa Francisco, que según los expertos deberá trabajar en busca de recuperar para la Iglesia Católica a los pobres que se fueron a la religión evangélica.
Para Carlos Libanio Christo, teólogo de la liberación brasileño más conocido como Frei Betto, “el papa Francisco coincide en muchas de sus ideas con la teología de la Liberación”. “Los 14 discursos que el Papa hará en Brasil (en Río de Janeiro y Aparecida) deberán confirmar o no si está cerca de la Teología de la Liberación, pero por todo lo que sabemos de él se trata de un hombre conservador en lo doctrinario y progresista en lo social”, aseguró Frei Betto en una entrevista con EL TELÉGRAFO.
La relación de Francisco con Brasil, que se presentó como peronista ante la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, en la entrevista que mantuvieron en marzo en el Vaticano, debe ser ampliamente superior que la que este país mantuvo con Joseph Ratzinger, Benedicto XVI. En 2010, el ahora Papa emérito pidió a obispos brasileños orientar a los fieles sobre a quién votar, en referencia a evitar a la no religiosa Rousseff, a quien la oposición acusó de querer abolir la pena por el aborto.
“Yo creo que la sintonía de Dilma Rousseff con el papa Francisco es mucho mayor que la que tuvo ella y su antecesor (Luiz Lula da Silva) con los anteriores”, expresó Frei Betto, prolífico escritor que junto al teólogo Leonardo Boff -apartado por Joseph Ratzinger en el papado de Juan Pablo II por su militancia en la Teología de la Liberación- vislumbran una primavera hacia la justicia social, el mensaje jesuita hacia los pobres y la deselitización de la Iglesia Católica.
Para Boff, en un texto reciente, el Papa jesuita acoge principios de la Teología de la Liberación, pero está bien que lo explicite. “Es mejor que un Papa no haga alarde de ninguna teología...”, afirmó Boff, quien fue juzgado en los años ochenta en el mismo sillón de la Inquisición donde se sentó Galileo Galilei.
Según Frei Betto, que vive en un convento de la ciudad de Sao Paulo y es asesor de movimientos sociales en toda América Latina, una de las batallas preferidas de Francisco es contra el establishment del Vaticano, llamado Curia Romana. “Espero que el Papa reforme enteramente la Curia Romana, es sintomático que haya enviado a detener al clérigo involucrado en la evasión de divisas y reformado el Código Penal del Vaticano”, evaluó.
La evaluación de los teólogos de Brasil, el país con más católicos del mundo, apunta como Frei Betto que el papa Francisco es “un conservador en lo doctrinario y un progresista en lo social”.
Por Pablo Giuliano
Corresponsal en Brasil
