La Asamblea venezolana debate sobre juicio político a Maduro

Tras la masiva marcha del miércoles en contra del gobierno, el Parlamento venezolano continuaba ayer el debate sobre la denunciada ruptura constitucional y el posible juicio político contra el presidente Nicolás Maduro por un supuesto abandono de funciones.

El plenario se realizó pese a que el servicio eléctrico fue cortado tanto en la sede del Legislativo como en el edificio administrativo en Caracas, informó Henry Ramos Allup, jefe de la Asamblea Nacional.

En la jornada de ayer, el Parlamento tenía previsto recibir a representantes de diversos gremios, academias y otras organizaciones de la sociedad civil del país, a fin de continuar analizando las razones que conllevaron a aprobar el inicio de la evaluación de la responsabilidad política del mandatario. Esto se da tras el ‘golpe de Estado’ que aseguran cometió al suspender la recolección de firmas para un referendo revocatorio presidencial.

Tras el debate se espera que la Cámara tome una decisión sobre el “estado constitucional” del presidente, quien fue citado para que comparezca ante el Parlamento el próximo 1 de noviembre, a las 15:00 hora local. La declaración será votada la próxima semana.

La bancada de diputados del oficialismo, autodenominada como el bloque de la patria anunció ayer que acudirá al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para introducir un recurso de nulidad ante las últimas acciones del Parlamento venezolano de mayoría opositora.

Ambas fuerzas políticas convocaron a sus simpatizantes a concentrarse en las afueras del Parlamento mientras se realizaba la sesión para que respalden la posición respectiva de los bloques.

Los accesos hacia el Legislativo estaban bloqueados y permanecían custodiados por efectivos de los cuerpos de seguridad del Estado.

El conflicto político en Venezuela se acentuó luego de que las autoridades electorales suspendieron la segunda fase de recolección de 20% de las firmas del padrón electoral, necesario para activar la revocatoria contra Maduro.

El miércoles, en el marco de la marcha denominada ‘Toma de Venezuela’, los opositores anunciaron la agenda de lucha “pacífica” con la cual buscan desafiar al gobierno y que comprende una huelga general para hoy y una marcha hacia el palacio de Miraflores, sede del gobierno, el próximo 3 de noviembre. Ese día la Asamblea declarará a Maduro en “abandono del cargo”, propuesta que surgió tras una gira de cinco días que realizó, desde el fin de semana pasado, por Oriente Medio.

Sin embargo, el TSJ considera que las decisiones del Parlamento carecen de validez legal por hallarse en “desacato”, tras juramentar a tres diputados cuya elección suspendió la justicia en el marco de una demanda de fraude interpuesta por el gobierno de Maduro.

En tanto, en vísperas de la huelga general, el mandatario anunció ayer un aumento del 40% en el ingreso mínimo de los trabajadores, la cuarta en lo que va de año.

Diosdado Cabello, primer vicepresidente del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), por su parte, advirtió que los trabajadores y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana tomarán las empresas que paralicen las actividades para unirse al paro general.

La marcha del miércoles por el centro de Caracas transcurrió en calma, pero el ministro de Interior y Justicia, general Néstor Reverol, informó la muerte de un policía con arma de fuego en un choque con manifestantes que bloqueaban una carretera en las afueras de la capital y notificó que otros dos agentes resultaron heridos.

El Ministerio Público confirmó la detención de 80 personas en nueve de los 24 estados del país. (I)