Ecuador, 26 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Holanda y Alemania registran setenta años de abusos a menores

Cerca de la puerta principal de la estación de Ámsterdam se encuentra la Iglesia de San Nicolás. En la foto derecha, Alemanes protestan por abusos de sacerdotes a menores en la Puerta de Brandeburgo, en la capital de su país.
Cerca de la puerta principal de la estación de Ámsterdam se encuentra la Iglesia de San Nicolás. En la foto derecha, Alemanes protestan por abusos de sacerdotes a menores en la Puerta de Brandeburgo, en la capital de su país.
Foto: EFE
03 de enero de 2019 - 00:00 - Redacciones Internacionales

Más de la mitad de los obispos y cardenales holandeses activos entre  1945 y 2010 tuvieron conocimiento de agresiones sexuales cometidas. “Veinte de 39 cardenales, obisposauxiliares holandeses estuvieron implicados en casos de abusos en la Iglesia Católica entre 1945 y 2010”, informó en septiembre el diario NRC.

“De ellos, cuatro abusaron de niños y los 16 restantes permitieron que se trasladara a curas pedófilos a otras parroquias”, informó el diario.

La Iglesia holandesa pudo “confirmar una parte” de esas revelaciones. Otras estuvieron basadas en informaciones anónimas recogidas por la célula de acogida de víctimas.

“Los nombres de varios obispos corresponden a lo que indica un informe encargado por la Iglesia en 2010”, declaró una portavoz de la Iglesia Católica holandesa, Daphne van Roosendaal.

Los obispos citados fallecieron, la mayoría, y los casos prescribieron. Ningún obispo implicado en la investigación del diario está activo. 

Los que siguen vivos no hicieron comentarios. Entre uno de los casos está el de una niña, de 12 años, que llevó hortensias al párroco. Él la empujó contra la puerta y se aprovechó de la peor manera. Al día siguiente no le dio la comunión, delante de todo el mundo, porque la menor había pecado y debía confesarse.

Pasaba el verano con sus tíos y subió a su bicicleta, recorrió 100 kilómetros hasta la casa de sus padres. Allí la trataron como si fuera culpable. Todavía, en su comunidad, la llaman la hija del diablo. Sucedió en los años cincuenta e imperó el silencio, como en otros países en donde ocurrieron agresiones sexuales certificadas.

Hasta 20.000 menores sufrieron abusos en la Iglesia holandesa desde 1945. Se investigan 350 denuncias de abusos sexuales a menores en familias y centros de acogida.

“La niña de las hortensias se emancipó, contrajo matrimonio y tiene hijos y nietos; una familia propia. Salió adelante, pero el pasado siempre pesa”, recuerda Annemie Knibbe, consejera de la Fundación de Mujeres para los Menores Víctimas de Abusos Eclesiales.

En Holanda hay comunidades cerradas de laicos, donde se observan los votos de castidad, obediencia y pobreza, según la regla monástica de San Benito.

Knibbe agrega que ahí reclutan a jóvenes que tal vez lleguen a los seminarios, pero a quienes no se les permite desarrollar un juicio moral para resolver el conflicto entre la lealtad a la jerarquía y la protección de la infancia. “Se los hace cómplices porque se arriesgan a la excomunión si denuncian los abusos.

Los obispos holandeses garantizan la firma de un código de conducta para el clero, pero estos grupos no lo suscribieron. Es un ambiente raro, con estrechos lazos con el obispado, y jóvenes separados de sus familias que dependen material y emocionalmente de la comunidad.

Portavoces de la Iglesia reconocieron como ciertos los nombres de los prelados y recordaron que “desde 2014 los sacerdotes necesitan un certificado de buena conducta para trabajar”.

La comisión contra la pedofilia que conformó el papa Francisco advirtió que la lucha a las agresiones de niños debe ser “la prioridad” de la Iglesia Católica. Hay consternación tras la filtración de un estudio que revela los abusos cometidos.

Según un estudio sobre la Iglesia Católica alemana encargado por la Conferencia Episcopal local y elaborado por tres universidades, hubo 3.677 chicos víctimas de abusos sexuales por parte de sacerdotes entre 1946 y 2014 en Alemania.

Según informaron los semanarios Spiegel y Die Zeit, más de la mitad de las víctimas tenían 13 años o menos, y la mayoría eran varones. Uno de cada seis casos fue una violación y 1.670 curas estuvieron implicados.

“Somos conscientes de la amplitud de los abusos sexuales que demuestra el estudio. Nos sentimos consternados y avergonzados por ello”, comentó el obispo Stephan Ackermann.

El estudio se inició hace cuatro años y fue presentado en septiembre en Fulda (estado de Hesse) en la Conferencia Episcopal alemana por su presidente, el cardenal Reinhard Marx. Durante tres años y medio, un grupo de investigadores de las universidades de Mannheim, Heidelberg y Giessen examinó 38.000 expedientes y manuscritos de 27 diócesis alemanas transmitidos por la Iglesia, pero no tuvieron acceso directo a los archivos.

El reporte detalló, también, que el verdadero número de víctimas posiblemente sea  mayor, de acuerdo con la investigación de los expertos de los centros de educación superior. 

Según el informe, durante décadas la Iglesia “destruyó o manipuló” numerosos documentos vinculados a los sospechosos y “minimizó” la gravedad y amplitud de los hechos.

Solo un tercio de los sospechosos  enfrentó juicios de acuerdo con la ley canónica, pero las sanciones fueron mínimas, incluso inexistentes, destacaron los autores.

La investigación describió   cómo los sacerdotes acusados con frecuencia eran trasladados sin advertir a los fieles sobre el posible peligro de estos para los niños en sus nuevas diócesis.

Hace años, la Iglesia Católica alemana se sacudió por las revelaciones de abusos sexuales.

En 2017, un informe reveló que por lo menos 547 chicos del coro católico de Ratisbona (en el Alto Palatinado, Baviera) fueron víctimas de sevicia entre 1945 y 1992.

El papa Francisco convocó para febrero de 2019 a una reunión en el Vaticano con los presidentes de las conferencias episcopales para tratar el tema de “la protección de los menores”.

Un documento detalló la espeluznante magnitud de esos crímenes. El informe interno encargado por la Conferencia Episcopal alemana y filtrado a la prensa indica que el abuso sexual a menores fue una práctica extendida en los últimos setenta años.

“Somos conscientes de la magnitud del abuso sexual, lo que queda demostrado por los resultados del estudio. Es opresivo y vergonzoso para nosotros. Hace cuatro años encargamos el estudio y nosotros, los obispos en particular, nos enfrentamos a los resultados”, señaló la Conferencia Episcopal alemana en un comunicado. 

Un tercio ha sido juzgado de acuerdo con el derecho canónico y en los casos en los que se impusieron sanciones fueron menores.

El papa Francisco, en su discurso de Navidad, dijo que la Iglesia hará todo lo posible por llevar los casos a la justicia y que no intentará encubrir ninguno de estos.

A los abusadores los acusó de lobos. (I) 

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media