La  comunidad gay y lesbiana de Nueva York conmemoró este domingo su Día del  Orgullo con un desfile por la Quinta Avenida y celebrando la recién  aprobada ley que permite en este estado los matrimonios entre personas  del mismo sexo.
 "Gracias, gobernador Cuomo" fue la leyenda de  muchas pancartas de uno de los desfiles más concurridos para celebrar a  la comunidad gay, lesbiana, transgénero y bisexual de Nueva York y que  tuvo, precisamente, en su cabeza al gobernador del estado, el demócrata  Andrew Cuomo, artífice de la ley aprobada el viernes y que permitirá los  matrimonios homosexuales desde fines de julio.
 "Nueva York ha  enviado un mensaje a la nación. Ya es hora de la igualdad en el  matrimonio", dijo Cuomo cuando comenzó la marcha en la Quinta avenida de  Manhattan, acompañado de su novia, Sandra Lee, y varios políticos  locales, algunos de ellos, como la presidenta del Concejo municipal de  la ciudad, Christine Quinn, abiertamente homosexual.
 Nueva  York se convirtió en la noche del viernes en el sexto estado de Estados  Unidos en permitir los matrimonios entre personas del mismo sexo,  después de una larga batalla parlamentaria y de un tenso debate entre  republicanos y demócratas en el Senado estatal, en donde al final la  propuesta de Cuomo reunió 33 votos a favor y 29 en contra.
 "Ha  sido una decisión maravillosa. Llevamos más de treinta años juntos y  ahora nos vamos a casar", dijo  Rory, de 62 años, un  neoyorquino, que se confesó "votante de Cuomo", y emparejado con  Michael, de 65, con quien ya fijó su boda para el próximo abril.
 Banderas arcoíris y de Estados Unidos, pero también de otros países  como Puerto Rico, Perú o Ecuador, ondearon a lo largo de la Quinta  Avenida de Manhattan.
 En tanto, sonaba música disco y muchas  asociaciones de gays, lesbianas, transgénero y bisexuales expresaban su  alegría porque muy pronto podrán casarse en Nueva York y tener los  mismos derechos que las parejas heterosexuales del resto del país.
 Las carrozas, algunas representando empresas estadounidenses tan  conocidas como la aerolínea Delta, la emisora de tarjetas de crédito  MasterCard o el banco Bank of America, además de las de diferentes  asociaciones y agrupaciones de esa comunidad hicieron oír sus palabras  de apoyo a Cuomo.
 "Estoy completamente de acuerdo y me siento  muy alegre. Hace 27 años que esto debía ya de haber pasado", dijo Evin Letin, una joven sueca de 27 años, que indicó haber viajado hasta  la ciudad de los rascacielos para manifestar su apoyo a ese tipo de  uniones.
 Blanca, una joven boliviana de 30 años y residente en  Nueva York, señaló, por su parte, haberse sumado al desfile "para  apoyar".
 "No tengo palabras. En un país tan libre como es  Estados Unidos, esto es lo mínimo que podía suceder", añadió Blanca, al  tiempo que lamentó que en su país, Bolivia, "todavía no está  legalizado".
 Una agrupación de ecuatorianos y peruanos,  ataviados con coloridos y carnavaleros vestidos y otros solo con tangas y  llevando en la espalda escrito "made in Ecuador" o "made in Perú"  (Hecho en Ecuador, en Perú), dejó sentir también su presencia en esta  festiva marcha.
 "Me da mucho gusto estar aquí, estoy  completamente de acuerdo con los matrimonios gays y pienso casarme",  dijo la peruana Cristal Flores, de 37 años y camarera de  profesión, que lamentó que "en Perú no hay aceptación de las parejas ni  de los matrimonios gays".
 Por esa avenida central de Manhattan  desfilaron representaciones uniformadas de la Policía y del servicio de  bomberos neoyorquinos, de algunos hospitales, boxeadores,  "cheerleaders" (animadores) deportivos y atletas, entre muchas otras  personas, que coreaban "Promesa mantenida" o "Gracias al Senado del  estado de Nueva York".
 En ese ambiente festivo se desarrollo  este tradicional desfile, que tiene lugar a finales de junio en Nueva  York, y en el que se vio a muchas parejas de gays y lesbianas  acompañados de sus hijos, muchos de ellos llevando camisetas a favor de  la igualdad en el matrimonio y otras con trajes de novia y la pancarta  de "acepto proposiciones de matrimonio".
 El desfile, en el que  según datos de la Policía de Nueva York se esperaba la participación de  más de medio millón de personas, terminó en el sur de la ciudad, en el  barrio de Greenwich Village, y frente al bar de Stonewall Inn, en donde  el 28 de junio de 1969 se desencadenaron los disturbios que dieron lugar  al principio del movimiento de liberación gay.
 El matrimonio  entre personas del mismo sexo tiene una consideración dispar en Estados  Unidos pues mientras en estados como Massachusetts, Nueva Hampshire,  Vermont, Connecticut y Iowa, además de Washington DC, y ahora Nueva  York, están permitidos, California lo prohibió después de someterlo a  referéndum en 2008.
 Las uniones de hecho eran ya legales en la  ciudad de Nueva York y San Francisco, al igual que lo son en otras de  los estados de California, Colorado, Hawai, Maine, Maryland, Nueva  Jersey, Ohio, Oregón, Wisconsin y Washington. 
